Oviedo (EFE).- El presidente asturiano, Adrián Barbón, ha decidido apurar al máximo los plazos previstos para la constitución del parlamento surgido de las elecciones autonómicas del 28 de mayo, que celebrará así la primera sesión de la nueva legislatura el 26 de junio, lunes, a las 12:00 horas.
Barbón, que este martes ha firmado el decreto de convocatoria del pleno, disponía de un plazo de 15 días desde la celebración de los comicios para firmar el decreto de constitución de la Junta General del Principado que, en cualquier caso, debe formalizarse dentro de los 20 días hábiles posteriores a las elecciones, es decir, no más tarde de la fecha que finalmente ha acordado el presidente.
Con la elección de esta fecha, Barbón pretende liberar a los partidos para que “se puedan centrar en garantizar la estabilidad política de los ayuntamientos”, cuya constitución tendrá lugar el sábado, 17 de junio, y “dejar margen de maniobra” a los alcaldes y alcaldesas que resulten elegidos.
Primero, las negociaciones municipales
El presidente, que ha aclarado que su gobierno seguirá trabajando con normalidad y que no entrará en funciones hasta que se constituya el parlamento autonómico, no se ha pronunciado sobre las negociaciones para la elección del presidente de la Junta General, si bien ha señalado que lo normal sería que quedase en manos socialistas.
“Iremos partido a partido. Ahora tocan las negociaciones municipales para garantizar la estabilidad municipal, y luego el 26 de junio”, ha señalado Barbón en una rueda de prensa en la que ha incidido en que, “lógicamente, siendo la socialista la opción preferida por los asturianos”, va a presentarse al proceso de investidura .
Máximo de dos meses para la investidura del presidente
Una vez constituido el parlamento en una sesión en la que los diputados tomarán posesión de sus escaños, se elegirá al presidente de la Cámara y a los otros cuatro miembros de la Mesa, el Estatuto de Autonomía fija un plazo máximo de dos meses para la investidura del presidente, por lo que, como tope, se debe resolver antes del 26 de agosto para no tener que convocar nuevos comicios.
En una primera votación, el candidato a la presidencia del Principado debe obtener mayoría absoluta para ser investido, un mínimo de 23 de los 45 diputados que conforman el hemiciclo autonómico, mientras que en la segunda bastaría con una mayoría simple, algo que el Estatuto asturiano propicia ya que no permite votar en contra.
En el parlamento asturiano de la duodécima legislatura estará formado por 24 hombres y 21 mujeres, y dieciocho escaños estarán ocupados por caras nuevas en un hemiciclo en el que habrá cinco grupos parlamentarios, dos menos de los que había en el anterior mandato..
Los socialistas serán el mayoritario con 19 diputados, mientras que el del PP estará integrado por 17, el de Vox, por cuatro, y el de IU, por tres, mientras que en el Grupo Mixto se integrarán el representante de Foro y la de Podemos ya que para formar uno propio hay que contar con un mínimo de dos parlamentarios y haber conseguido al menos un 3 por ciento de los votos en los comicios. EFE
