Barcelona, (EFE).- El congreso tecnológico MWC, popularmente conocido como Mobile, abrirá sus puertas este lunes con la previsión de reunir a 95.000 asistentes, recuperar al grueso de los congresistas asiáticos que no acuden a la cita desde antes de la pandemia y con la persistente sequía en Cataluña como condicionante.
Los 95.000 congresistas augurados por la GSMA, organizadora de la feria, son más de los registrados en las ediciones pospandemia -88.5000 el año pasado-, si bien antes de la aparición de la covid-19 se llegó a rebasar en hasta cuatro ocasiones la cifra de 100.000 personas -en 2016, 2017, 2018 y 2019-.
Los hoteles de la ciudad volverán a estar llenos, si bien las estancias serán más cortas y se prevén menos celebraciones paralelas que en ediciones anteriores, y los organizadores han respirado con alivio al decidir finalmente el sector del taxi no convocar movilizaciones durante los días del evento, una amenaza que sobrevuela en prácticamente cada ocasión.
Menos agua…
Barcelona y buena parte de Cataluña se encuentran desde inicios de febrero en situación de emergencia por sequía, lo que hace que las dotaciones de agua máxima se hayan reducido a 200 litros por día y habitante para todos los usos (comercial, industrial, lúdico o personal) y que se deba limitar en un 80 % el riego agrícola, en un 50 % el de ganadería y en un 25 % el industrial, el mismo porcentaje que se aplica para usos recreativos.
Una situación de la que es consciente la organización del evento, pero que puede que no conozcan muchos congresistas: es por ello que en las más de 20 pantallas digitales distribuidas por el recinto ferial, así como en las estaciones de metro, se emitirá un sencillo mensaje en inglés, catalán y español: “Cada gota cuenta”.
El Gremio de Hoteles de Barcelona también distribuye a los establecimientos material específico de la campaña “STOP. El agua es un bien escaso, ayúdanos a preservarla”, que la entidad realiza con la colaboración de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona, y Fira de Barcelona ha tomado medidas para minimizar el gasto de agua.
…y más asiáticos
La GSMA espera recuperar en esta edición, que tendrá lugar hasta el jueves, día 29, parte de los congresistas asiáticos que no han vuelto a participar en el MWC desde la irrupción de la pandemia. Ello pese a la difícil situación económica que atraviesa China.
Eso, más que un problema, debe ser un estímulo para las empresas de ese país, ya que “el MWC es el lugar en el que hacer negocio y crecer”, según rezan los organizadores. De hecho, en esta edición harán acto de presencia por primera vez el gigante China Telecom y la japonesa KDDI, entre otros. La también china Huawei, además, volverá a ser la que más espacio ocupe.
Al tiempo, como viene siendo habitual en las últimas ediciones, los profesionales relacionados con la telefonía móvil serán menos de la mitad del total, lo que explica que el antes conocido como Mobile World Congress optara por cambiar su nombre y sea ahora el MWC, sin más.
El rey presidirá la inauguración
El domingo, el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) acogerá la cena oficial del MWC, nuevamente con la presencia del rey Felipe VI, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, entre otras autoridades. Horas después, el lunes por la mañana, los mismos protagonistas inaugurarán el congreso, que alcanza su mayoría de edad en la capital catalana, donde aterrizó en 2006.
En esta ocasión, la feria ocupará los ocho pabellones del recinto de Gran Via de Barcelona, que congregará a más de 2.400 compañías expositoras y a unos 1.100 ponentes, repartidos en 260 sesiones. Los visitantes podrán acudir al pabellón de España, organizado por Red.es y que tendrá un espacio institucional de 1.000 metros cuadrados, 70 ponencias y más de 100 relatores de primer nivel.
