La alcaldesa de Maracena (Granada), Berta Linares (PSOE), durante la rueda de prensa ofrecida este miércoles, donde ha asegurado que desconoce si el trasfondo del secuestro de la edil Vanessa Romero puede estar relacionado con un supuesto caso de corrupción urbanística. EFE/Miguel Ángel Molina

Concejal cree que fue secuestrada por tener información comprometida

Madrid/Granada, (EFE).- La concejal de Maracena (Granada) Vanessa Romero, secuestrada durante unas horas por la pareja de la alcaldesa, Berta Linares, apuntó ante la Guardia Civil a la posibilidad de que el hecho de que dispusiera de información comprometida contra la regidora sobre la gestión municipal estuviera detrás de lo ocurrido.

Según han informado a EFE fuentes próximas a la investigación, la edil, que actualmente ostenta la Concejalía Maracena 2030 pero que con anterioridad había asumido otras áreas de mayor peso como la de Urbanismo, trasladó esa sospecha a los agentes durante la declaración que prestó ayer ante la Guardia Civil, encargada de la investigación del caso.

El temor a que hiciera pública esa información podría estar detrás del secuestro del que fue víctima la concejal por unas horas, según su testimonio.

Según las mismas fuentes, la alcaldesa, como ha hecho esta mañana en rueda de prensa, apuntó por su parte a los agentes que el secuestro podría estar relacionado con los problemas de salud mental que padece su pareja, Pedro G., un hombre sin antecedentes policiales que permanece detenido a la espera de pasar en las próximas horas a disposición judicial.

La alcaldesa desconoce los motivos

En su comparecencia pública de esta mañana y a preguntas de los periodistas, la regidora ha asegurado que desconoce si el trasfondo del secuestro puede estar relacionado con un supuesto caso de corrupción urbanística que la concejal secuestrada habría amenazado con denunciar.

Los hechos ocurrieron la mañana de ayer martes, cuando la concejal Vanessa Romero llevaba a sus hijos a un colegio de Atarfe, localidad próxima a Maracena, momento en el que el ahora detenido se le acercó y le pidió al parecer el favor de que le trasladara en su coche hasta una gasolinera.

Una vez en el coche, el hombre sacó una pistola con la que amenazó a la concejal, a la que obligó a meterse en el maletero del vehículo, que dejó abandonado, con ella dentro, en un local de la vecina localidad de Armilla.

Un par de horas después la mujer logró salir del maletero empujando los asientos traseros y, una vez fuera, también escapó del local donde había sido introducido el coche. EFE