Sevilla,(EFE).- La industria andaluza avanza con paso firme en los últimos años hasta alcanzar en el año 2022 el 13,5 % del PIB de la comunidad autónoma, el mayor peso relativo en más de dos décadas desde el año 2000, y supera en un punto el porcentaje que representa el turismo en el Producto Interior Bruto (en torno al 12,5 %).
En este proceso de avance la industria andaluza creció un 5 % el año pasado, dos puntos porcentuales por encima de la media nacional (3 %), lo que ha favorecido un aumento notable del peso del sector en la estructura productiva de la región, según datos facilitados por la Consejería de Política Industrial.
Otro dato que muestra su fortaleza es la contribución al Valor Añadido Bruto (VAB) industrial de España, que pasa del 9,97 % en 2021 al 10,86 % en 2022, un punto porcentual adicional, a pesar del contexto de dificultades en las cadenas mundiales de suministro de materias primas y el encarecimiento de los costes energéticos, que repercute de manera especialmente negativa en la industria andaluza por ser intensiva en consumo de energía.
Dinamismo en la industria andaluza para el PIB
El protagonismo corresponde a la industria manufacturera en la que ha crecido el empleo, incluidos los servicios avanzados y científicos, al pasar de 459.484 trabajadores en el año 2015 a 529.089 en 2021, acompañado de una mayor estabilidad laboral con una tasa de temporalidad en el año 2021 del 26,5 %.
De hecho, ha crecido el número (entre 10 y 49 trabajadores) de empresas manufactureras y servicios industriales que, en 2021, fue de 4.314, un 1,5 % más que el año anterior.
También ha aumentado el número de empresas industriales exportadoras, un 25,5 % más en 2021 con respecto a 2015, con un aumento de su facturación en ese periodo de un 34,6 %, al pasar de 16,5 a 22,2 millones de euros.
Este dinamismo industrial es fruto de un giro en la política industrial de la Junta en línea con los objetivos de la descarbonización de la economía con una fuerte apuesta por las energías limpias y el hidrógeno verde como palanca de la industrialización de Andalucía y con un papel esencial de la minería como proveedor de las materias primas necesarias para la transformación digital.
Para lograr estos objetivos la Consejería ha articulado tres planes de acción, el primer CRECE industria 2021-2022 ha arrojado un balance de 3.170 proyectos acogidos a iniciativas de apoyo gestionadas por la Junta, de ellos 352 en sectores de alta y media-alta tecnología, con una inversión total de 6.757 millones, de los que 234 millones ha aportado la Junta y 65 millones el Estado, lo que supone un factor multiplicador de 22 en movilización de recursos.
Inversiones con empleo
El empleo asociado a estos proyectos se cuantifica en casi 40.000, más del triple de los inicialmente previstos.
Uno de los “aciertos”, según la Consejería de Política Industrial, han sido los planes sectoriales, de los que hasta ahora se han aprobado ocho, entre ellos los de la piedra y el mármol; el cemento; el sector químico; la madera y el mueble; la metalúrgica; el sector textil, cuero y calzado; y la industria para la edificación.
Esta estrategia de impulso se ha apoyado en la promoción de los sectores industriales a través de Extenda y de la unidad de captación de inversiones, Invest in Andalucía, con 33 proyectos comprometidos, que suponen una inversión estimada de más de 138 millones y la creación de 2.127 empleos fijos directo.
Una de las medidas que más están contribuyendo a la atracción de capital y empleo es la asignación a la Unidad Aceleradora de Proyectos de 44 iniciativas industriales de interés estratégico, que llevan aparejada una inversión de 4.250 millones y más de 24.000 empleo.
Además, se han desplegado ayudas complementarias a los incentivos económicos regionales, dotadas con 150 millones de fondos propios de la Junta, con un balance, hasta el momento, de 29 solicitudes de proyectos tractores acogidos a las dos convocatorias abiertas, con una inversión asociada de 1.400 millones. EFE
