Málaga, (EFE).- Hojas de bambú recién brotadas y recién cortadas, procedentes de un vivero especializado de Portugal, componen la dieta de Chang y Maggie, los dos pandas rojos que viven en el zoológico Bioparc de Fuengirola (Málaga).
Este zoológico recibe cada dos semanas seis kilogramos de bambú. Seleccionado entre las hojas más frescas de las que se cultivan en el vivero Bambú Parque. Ya que de las 1.200 especies de bambú que existen, los pandas rojos solo comen unas pocas, ha informado este sábado Bioparc en un comunicado.
Este vivero portugués está considerado el más importante de Europa en el cultivo de cien especies diferentes de bambú. Recolecta las ramas más tiernas y recién brotadas por la tarde. Las empaqueta con cuidado y las envía durante la noche para que lleguen a Fuengirola a primera hora de la mañana.
Ya en el zoológico, el bambú es refrigerado en una cámara frigorífica con una pulverización fina de agua cada hora. Para asegurar que la planta permanece fresca durante dos semanas hasta la llegada del próximo envío.
Casi medio kilo de bambú diario
El bambú supone el 90 por ciento de la dieta del panda rojo. Que debe ingerir alrededor de un 20 por ciento de su peso corporal en bambú todos los días.
En el caso de Chang y Maggie, estas cantidades ascienden a casi medio kilo diario de bambú. Acompañado con una gran variedad de frutas y complementos.
El bambú es una rica fuente de fibra para los pandas rojos y contiene algunas proteínas, vitaminas y minerales esenciales. Y también les proporciona un alto contenido de agua que les ayuda a mantenerse hidratados en su entorno natural.
En los últimos cincuenta años, la población del panda rojo ha disminuido un 40 por ciento debido a la deforestación y a la destrucción de su hábitat.
Los pandas rojos habitan en libertad en zonas localizadas de Nepal, China, Myanmar, India y Bután, y la UICN estima que quedan menos de 10.000 ejemplares en estado salvaje. EFE
