Una supuesta 'narcolancha' de gran potencia que fue hallada el pasado 3 de mayo en una playa de Dénia (Alicante), sin sustancias estupefacientes ni personas a bordo. EFE/Juan Carlos Cárdenas/ARCHIVO

Seis narcolanchas se refugian en la costa de Almería de la mala mar

Almería (EFE).- La Guardia Civil sigue la pista de al menos seis narcolanchas que han sido vistas y grabadas en distintos puntos del litoral de Almería. En concreto, del parque natural Cabo de Gata-Níjar. Está a la espera de que mejore la climatología para poder interceptarlas.

Fuentes de la Comandancia de Almería han confirmado a EFE la presencia de estas embarcaciones. Según adelanta el periódico ‘Diario de Almería’, han sido avistadas entre los núcleos urbanos de San José y Los Escullos. Estos están en el término municipal de Níjar.

El Instituto armado ha indicado que se resguardaban de los fenómenos costeros y del mal estado del mar. De todas formas, insisten en que “no son narcolanchas” en sí. La principal hipótesis que baraja el cuerpo es que se trate de naves dedicadas al “petaqueo”. Esto es, a facilitar el repostaje de combustible a otros barcos dedicados al narcotráfico o la inmigración.

Han precisado que no se ha procedido a interceptarlas debido a las malas condiciones meteorológicas. Además, al considerar que puede tratarse de “petaqueo”, se trataría de una infracción o delito de contrabando, y no de tráfico de droga.

Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Almería han incidido en que la Guardia Civil realiza una vigilancia por tierra y aire a la espera de que mejore el tiempo.

Por su parte, el secretario general de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Almería, Víctor Vega, ha lamentado en declaraciones remitidas a EFE que esta escena se repita. Esto sucede “apenas una semana después” de que otras siete embarcaciones fuesen grabadas cuando fondeaban en distintos puntos del litoral almeriense.

Años denunciando falta de medios

“Estamos denunciando desde hace años la falta de medios” para la persecución de las narcolanchas en Almería, ha dicho. A mismo tiempo, pregunta al delegado de Gobierno en Andalucía si exigirá al Ministerio del Interior que actúe o aún mantendrá que este fenómeno se produce por la presión policial ejercida en otros puntos. Este el caso, ha dicho, del Estrecho de Gibraltar.

narcolanchas Almería
Minuto de silencio que se guardó en Barbate (Cádiz) el pasado 12 de febrero en repulsa por la muerte de dos agentes de la Guardia Civil cuando fueron arrollados por una narcolancha en el puerto de la localidad. EFE/Román Ríos/ARCHIVO

Considera que el Ministerio del Interior debe mantener una reunión con Defensa para solicitar el apoyo “inminente” de la Armada. Esto porque el problema no se va a calmar sólo. A su juicio, las mafias de la migración y del narcotráfico tienen “cada vez más poder y su presencia es cada vez más habitual”.

“Poco podemos hacer más que esperar desde lejos a que se vayan, como la semana pasada. En ninguna costa europea pasa esto. Almería ya parece Nador”, ha concluido.

Presión policial

El pasado 4 de marzo, el delegado del Gobierno, Pedro Fernández insistió en que las narcolanchas que se refugiaron del temporal en playas de Cabo de Gata (Almería) lo hicieron como consecuencia de la presión policial. Ha justificado que no se actuara contra ellas por motivos de seguridad.

Explicó o que se habían refugiado en la zona de la playa de Genoveses, en el entorno de Cabo de Gata, para esperar una mejora de las condiciones meteorológicas. Estas también impedían a los agentes afrontar tareas de identificación o detenciones.

“Las condiciones no lo aconsejaban y podían poner en riesgo la vida de los agentes”, resumió Fernández. El delegado confirmó acto seguido que las narcolanchas ya no estaban en ese espacio.

Precisamente, la Guardia Civil informó de que está llevando a cabo un análisis de las mareas y vientos para poder determinar el posible desplazamiento de una embarcación destinada al “petaqueo”. En esta desaparecieron tres jóvenes de Balerma, El Ejido (Almería).

Por el momento se han presentado dos denuncias por parte de los familiares de dos de los jóvenes y, por ahora, su desaparición se considera de carácter “voluntario”.