Sevilla, (EFE).- La Junta de Andalucía ve “previsible” que se permita el llenado de piscinas comunitarias en la provincia de Málaga, que hasta ahora estaba prohibido por las restricciones de agua, pero considera “muy difícil” que se habilite a hacerlo en las privadas.
El presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha explicado en un encuentro informativo que serán los ayuntamientos los que decidan qué hacer con las piscinas comunitarias para cumplir con los aportes de agua que le da la Junta, que ahora es de 200 litros por habitante y día.
Sin embargo, ve “difícil” el llenado de piscinas privadas “ahora mismo” en Málaga y “algunos entornos” de Almería y del Sur de Granada, aunque en este último enclave “hay menos incidencia” de la sequía.
Norte de Córdoba
En cuanto a la zona Norte de Córdoba, ha dicho que es previsible que en 15 o 20 días, “si todo va bien” en los análisis de agua, “los grifos se puedan abrir con normalidad” y los 80.000 vecinos afectados desde hace diez meses tengan agua.
Moreno ha calificado las lluvias de Semana Santa de “milagrosas” pero ha recordado que había un déficit de cuatro años y que las precipitaciones no han sido uniformes, mucho menores en la Cuenca Mediterránea.
“La situación sigue siendo alarmante para una parte importante de la población andaluza”, ha advertido Moreno, quien cree que las lluvias sí han dado la “tranquilidad” en Huelva, Sevilla, Cádiz y Córdoba.
Seguridad con más lluvias
La Junta seguirá haciendo las obras en los puertos para la llegada de barcos con agua, que no serán necesarios este verano, pero para estar preparados en el futuro.
El presidente ha explicado que a Andalucía le daría “seguridad” que haya otro episodio de lluvias en abril o mayo.
Respecto a la proposición de ley de regadíos de Doñana, ha dicho que “sinceramente” no se arrepiente de haberla impulsado en el Parlamento: “Si ha habido una solución al problema es porque pusimos el dedo en la llaga”.
El presidente considera que con esta iniciativa “forzaron” a las administraciones competentes a llegar a un acuerdo y “al final ha acabado bien”. EFE
