Sevilla, (EFE).- El bebé que fue abandonado el pasado lunes en un portal de un edificio de Sevilla tiene solo unos días de vida y se cree que todavía tenía restos del cordón umbilical, ha explicado a los periodistas el subdelegado del Gobierno en la provincia, Francisco Toscano.
En conferencia de prensa, Toscano ha confirmado que la Policía recibió el pasado del pasado un aviso por parte de una vecina de la barriada de Madre de Dios, “que informaba de que había un bebé muy pequeñito en un portal de esta barriada”.
La Policía Nacional desplazó a varios efectivos, mientras la vecina “acudía a la farmacia a comprar pañales y leche” para el menor, trasladado al Hospital Virgen del Rocío, donde se le atiende y que se encuentra «en buen estado de salud”.
Ahora, hay una “doble vía”, ya que la Policía ha contado con los servicios de protección de menores, además de investigar “quiénes son los posibles progenitores de este bebé”, y determinar “ si hubiera algún tipo de responsabilidad penal o de cualquier otro tipo de la que tuvieran que responder”.
Protocolo habitual
A preguntas de los periodistas, Toscano no ha precisado si el bebé sufre algún problema relacionado con posibles sustancias consumidas por la madre, ya que no está “ratificado médicamente”, y tampoco ha indicado su sexo ni su edad, aunque ha apuntado del menor que “incluso sería posible que tuviera el cordón”.
Según han informado a EFE fuentes de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía, el bebé está siendo objeto de análisis en el centro hospitalario, siguiendo el protocolo habitual en estos casos, mientras se tramita su “desamparo provisional”.
Con respecto a la familia que podría acogerle, las mismas fuentes han indicado que se busca a una que pueda tener “una guarda con fines de adopción”, ya que se podría dar el caso de que, finalmente, se queden con su custodia de forma permanente.
De forma paralela se busca a sus padres, para lo que, entre otros aspectos, se están rastreando los registros de nacimientos en las últimas semanas en la capital andaluza. EFE