Sevilla, (EFE).- El consumo doméstico y el turismo han impulsado un crecimiento diferencial de la economía andaluza de dos décimas más que la española en el primer trimestre de 2023. Lo que ha llevado al Observatorio Económico de Andalucía (OEA) a revisar al alza el aumento del PIB para este año hasta el 1,6 %. Aunque será cuatro décimas inferior al de España.
El presidente del OEA, Francisco Ferraro, y el profesor de la Universidad Pablo de Olavide Manuel Alejandro Hidalgo han presentado hoy en la Fundación Cámara las previsiones para la economía andaluza.
Y han destacado que tuvo un comportamiento mejor del previsto entre enero y marzo. Y previsiblemente se mantendrá en el segundo trimestre. Si bien en el segundo semestre ralentizará su crecimiento por el impacto que tendrá en las rentas la subida de los tipos de interés. Que conllevan el encarecimiento de las hipotecas y los créditos.
El impacto de la sequía
También impactará en la evolución de la economía andaluza la sequía, con mayor fuerza que en el resto de España. Dado el peso del sector agroalimentario en la estructura productiva y de la agricultura. Que supone el seis por ciento del PIB. Y, aunque el OEA no lo ha cuantificado otros organismos lo sitúan en un menor crecimiento de entre medio y un punto de PIB, ha explicado el profesor Hidalgo.
El dinamismo económico andaluz en esta primera parte del año se sustenta en el consumo doméstico. Que ha empezado a crecer con fuerza este año, sobre todo el consumo de bienes duraderos. Mientras que cae el destinado a la alimentación, y también en el turismo extranjero, que ha crecido un 20 % en visitantes. Y en un 9 % en el gasto.
A su vez el repunte del consumo se explica por la tendencia a la baja de la inflación. Y por la mejora de la renta de los andaluces impulsada por la recuperación del mercado de trabajo. Así como por la mejora en la confianza y las expectativas de los consumidores.
De hecho, el crecimiento es muy intenso en los sectores de comercio, hostelería y transporte. Y aunque el resto también avanzan lo hacen a menor ritmo, mientras que ha caído el consumo público, ha apuntado Hidalgo.
La incertidumbre del tipo de interés
No obstante, sobre este escenario positivo se ciernen dudas e incertidumbres porque no ha terminado la subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo, que previsiblemente los volverá a subir y llegará a su tope en verano, y los efectos de esta medida van con algún retraso y, por tanto, se notarán en el segundo semestre y también en parte por el aumento de los precios, aunque seguirán moderándose, así como por la sequía si persiste a lo largo del ejercicio.
A favor del dinamismo económico juega el despliegue “con intensidad” de los fondos europeos Next Generation, ha añadido Francisco Ferraro, que ha valorado el acuerdo salarial entre sindicatos y empresarios en España porque “ayuda a la estabilidad y a anclar la inflacón2.
Ha recordado que Andalucía ya ha recuperado el nivel de PIB previo a la pandemia del coronavirus, pero no la renta per capita por habitante, nivel que podría alcanzar en 2024, con una previsión de crecimiento económico del 2,1 % para el próximo año. EFE
