Las Palmas de Gran Canaria (EFE).- El Gobierno canario estudia aplicar un plan de contingencia ante la subida de la factura eléctrica generada por sus edificios públicos, que se estima que sea de 51 millones al finalizar este año, cuando la cantidad consignada para tal fin en los últimos presupuestos fue de 21 millones.
Así lo ha anunciado este miércoles en la rueda de prensa posterior a la celebración del Consejo de Gobierno su portavoz, Julio Pérez, quien ha informado de que, ante esta subida, se ha autorizado una ampliación y modificación de crédito por 26,5 millones interesada por la Consejería de Transición Ecológica debido a la falta de crédito disponible.
Pérez ha detallado que se ha iniciado una licitación para el suministro eléctrico en edificios públicos que garantice ese servicio y se ajuste al presupuesto aprobado para el ejercicio 2023.
El portavoz ha considerado que es posible que este gasto pase de esos 51 millones de euros estimados al cierre de este año y ha explicado que los grandes suministradores se resisten a hacer contratos por amplios períodos de tiempo, dada la coyuntura incierta que presentan los mercados. EFE
