Santa Cruz de Tenerife (EFE).- El consejo de gobierno del Cabildo de Tenerife ha aprobado este martes el expediente para la contratación de las obras del Tenerife Circuito del Motor, en Granadilla de Abona, que contará con un presupuesto de licitación de 56 millones de euros y un plazo de ejecución de 40 meses.
El presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, señala en un comunicado que esta licitación, que supone “un gran paso de gigante”, permitirá que las empresas se puedan presentar ya para ejecutar las obras, con lo que “este año podremos ver maquinaria trabajando”.
La licitación comprende la ejecución de tres proyectos: la canalización de los tres barrancos con el plan de defensa contra avenidas, la explanación e instalaciones para graderíos desmontables y, por último, la pista de velocidad.
El vicepresidente primero y consejero insular de Carreteras, Enrique Arriaga, asegura que “son muchas las dificultades que se han presentado en el camino, pero estamos muy contentos porque en unos meses se podrán iniciar las obras de esta infraestructura tan demandada por los miles de aficionados al motor que hay en la isla”.
Arriaga detalla que el circuito contará con una superficie de cerca de 650.000 metros cuadrados que permitirá celebrar “todo tipo de competiciones con calidad y, sobre todo, con seguridad”.
Destaca que el trazado cuenta con las homologaciones de la Federación Internacional de Automovilismo y de la Federación Internacional de Motos para albergar “carreras de máximo nivel”.
En todo caso, este espacio no será exclusivo para “grandes eventos”, pues el objetivo del gobierno insular, asegura Arriaga, es que “el mundo del motor siga creciendo en Tenerife”, y por ello contará con instalaciones dedicadas a la formación en torno al automovilismo y también habrá parcelas en las que podrán instalarse empresas relacionadas con este sector para hacer pruebas de componentes, de materiales de competición, montaje de piezas y reparación.
Una vez finalizadas las obras, el Circuito del Motor contará con un trazado de 4.050 metros, con una recta principal de unos 800 metros de largo y una serie de rectas secundarias diseñadas para facilitar los adelantamientos, especialmente en el caso de los coches, con diversas rampas para las motos.
Además, se caracterizará por ser “uno de los pocos circuitos del mundo en circular en sentido contrario a las aguas del reloj”, recalca el Cabildo de Tenerife en el comunicado.
El trazado se desarrolla con un total de 16 curvas en planta, de las que habrá 11 de izquierda y 5 de derecha.
Todas ellas tendrán diferentes radios de base partiendo de un mínimo de 21 metros a un máximo de 100 metros.
Transversalmente, las curvas contarán con una pendiente única que varía entre el 1% y el 5% según el radio y la velocidad de desplazamiento.
Todo esto se verá complementado con un ‘paddock’ de 72.000 metros cuadrados preparados para acoger todas las necesidades que requiere cualquier competición nacional o internacional. Allí habrá 15 boxes para coches y 45 para motos.
La infraestructura también contará con un graderío con capacidad para más de 5.000 personas, un restaurante y una zona comercial. EFE
