Unicef Canarias, junto a psicólogos especialistas en atención a la infancia migrante, han reclamado este miércoles más medios, especialmente humanos, y una mejor coordinación entre administraciones y actores vinculados en el cuidado de la salud mental a los niños migrantes y refugiados. En declaraciones a los medios tras celebrar una jornada de formación sobre salud mental e infancia migrante y refugiada en Las Palmas de Gran Canaria, la responsable regional de Unicef, Rosa Gloria Suárez (2i), ha dicho que el objetivo es que los profesionales, tanto en centros de acogida como en sociosanitarios, tengan una visión "transcultural" que les permita atender a los menores de manera adecuada. En la imagen, inauguración de la jornada con el director de Casa África, José Segura (c), el coordinador del programa de psicología transcultural del Hospital Vall D'Hebron de Barcelona, Francisco Collazos (i); la directora general de Programas Asistenciales del Servicio Canario de Salud, Rita Tristancho (2d); y el jefe del Servicio de Programas de Prevención y Protección de Menores del Gobierno de Canarias, José Pereira (d). EFE/ Elvira Urquijo A.

Unicef pide más medios y mejor coordinación para la salud mental de los menores migrantes

Las Palmas De Gran Canaria, 17 may (EFE).- Unicef Canarias, junto a psicólogos especialistas en atención a la infancia migrante, han reclamado este miércoles más medios, especialmente humanos, y una mejor coordinación entre administraciones y actores vinculados en el cuidado de la salud mental a los niños migrantes y refugiados.

En declaraciones a los medios tras celebrar una jornada de formación sobre salud mental e infancia migrante y refugiada en Las Palmas de Gran Canaria, la responsable regional de Unicef, Rosa Gloria Suárez, ha dicho que el objetivo es que los profesionales, tanto en centros de acogida como en sociosanitarios, tengan una visión “transcultural” que les permita atender a los menores de manera adecuada.

“Las acciones deben ser eficaces y coordinarse bien. Son niños que vienen de situaciones de sufrimiento y de mayor vulnerabilidad, con precariedad afectiva y que en muchos casos parten de conflictos bélicos y climáticos”, ha aseverado Suárez.

700 MENORES A FINALES DE AÑO

Para la responsable de Unicef, la situación de los recursos de atención a menores migrantes en el archipiélago ha mejorado, ya que ha pasado de un pico de 2.700 menores tutelados por el Gobierno de Canarias a que la previsión sea que haya, de cara a finales de año, un total de 700, “una cifra que permitiría una buena atención integral a los niños”.

“El gran problema es la falta de medios. El Servicio Canario de Salud tiene un plan ambicioso de salud mental que en papel está muy bien reflejado, pero con poca eficacia en cuanto a ejecución”, ha lamentado la responsable de Unicef en las islas.

Por último, Suárez ha señalado que los psicólogos de los centros de acogida se encuentran “muy saturados” con situaciones cambiantes y ha lamentado que en algunos casos los niños sufren deslazamientos continuos” entre centros.

En las jornadas también ha intervenido el coordinador del programa de psicología transcultural del Hospital Vall D’Hebron de Barcelona, Francisco Collazos, que ha alertado de que las vivencias potencialmente traumáticas de los menores les exponen a poder padecer trastornos mentales de cualquier índole.

UNA RESILIENCIA MAYOR

“La resiliencia de estos niños hace que la mayoría no padezcan trastornos mentales o psiquiátricos que necesiten tratamientos especiales de inicio, pero sí es necesaria la intervención preliminar para poder prevenir y promocionar la salud mental de los niños”, ha apuntado el especialista.

Ha añadido que el hecho de no tener en cuenta estas vulnerabilidades y vivencias puede devenir en trastornos afectivos, de ansiedad o, incluso, en el abuso de sustancias o algún trastorno psicótico, ha especificado.

En opinión del doctor, a la falta de medios materiales hay que añadir la “ineficiencia de ciertas fórmulas”.

Así, ha afirmado que existe una carencia de profesionales y que el tejido y la red de salud mental y de protección de menores “está muy tensionada”, pero que también se podría “revisar el modelo” y avanzar hacia un sistema “más integrador y de mayor coordinación entre diferentes actores”, especialmente los profesionales y asociaciones sobre el terreno, con equipos interdisciplinares.

“Todo con una mirada especializada de los facultativos, pero reforzando el trabajo de prevención primaria, trabajando las causas subyacentes que luego derivan en trastornos mentales”, ha concluido Collazos.

DIFERENCIA ABISMAL

Para Borja Fernández, psicólogo de la asociación Quórum Social que lleva más de tres años trabajando con menores migrantes en Gran Canaria, la diferencia entre un menor cuya salud mental ha sido atendida adecuadamente y otro que no ha tenido esa suerte es “abismal”.

También ha detallado que el perfil de los migrantes suelen ser el de chicos “con una resiliencia brutal”, mayor de la habitual, para afrontar procesos de duelo o la dureza del viaje.

En este sentido, ha llamado a no olvidar la individualidad de cada menor y a trabajar y mejorar la coordinación, especialmente en el ámbito educativo.

“El tema escolar es el talón de Aquiles, porque se sigue expulsando a muchos niños por problemas de conducta. Es un lugar de muchos conflictos para los menores, un sitio en el que se marca la diferencia”, ha explicado Fernández.

DE LA IMPROVISACIÓN A LA PREPARACIÓN

Al igual que la responsable de Unicef, ha notado mejorías en la atención respecto al inicio de la crisis migratoria en Canarias, ya que al principio “el tema psicológico estaba absolutamente descuidado y todo era improvisación”.

“Ahora la red está totalmente preparada para que cuando llega un menor. Todo el mundo saber qué tiene que hacer, dónde tiene que ir, y se hace una atención muy integral”, ha detallado el psicólogo.

Ha señalado además que las realidades de estos chicos es muchas veces “dramática”, ya que muchos de ellos llegan presionados por su familia para que les sustenten.

“También hay otras realidades muy duras, como la de las chicas, con muchos casos de abuso, incluso durante los viajes, así que la atención es muy complicada y diversa”, ha insistido. EFE