La bailaora María Pagés, Premio Nacional de Danza y Princesa de Asturias de las Artes, y el codirector de la obra, el dramaturgo marroquí El Arbi El Harti. EFE/Ángel Medina G.

María Pagés vuelve al Cuyás con ‘Paraíso de los negros’, un espectáculo vitalista sobre el miedo

Las Palmas de Gran Canaria (EFE).- La bailaora sevillana María Pagés, Premio Nacional de Danza y Princesa de Asturias de las Artes 2023, regresa este fin de semana al Teatro Cuyás con ‘Paraíso de los negros’, un espectáculo “vitalista sobre el origen del miedo”, asunto sobre el que la artista “buscará la luz” en diez escenas.

Así lo ha explicado en rueda de prensa el codirector de la obra, el dramaturgo marroquí El Arbi El Harti, pareja de Pagés y director del Centro Coreográfico al que da nombre la bailaora en Fuenlabrada, quien ha desvelado que esta pieza nació a raíz de que la compañía recibiera en el Festival Internacional Cervantino la propuesta de hacer un montaje que invitara a reflexionar “sobre las fronteras físicas”.

“Empezamos a trabajar y llegó la pandemia y nos encerraron en casa y la idea de la frontera se fue diluyendo en otra reflexión sobre los confinamientos” que desembocó en ‘Paraíso de los negros’, ha detallado El Harti.

Inspirada en un poema de Federico García Lorca, esta obra pretende llamar la atención sobre las consecuencias del auge de los populismos y advertir de que “el capitalismo, que fue una experiencia positiva para la Humanidad, se está desmembrando por dentro y puede generar monstruos en un futuro próximo si no hay un cambio de paradigma a nivel mundial”.

Esta coreografía, que se acompaña de música en directo, es, por tanto, “una reflexión sobre la democracia como objeto de deseo que se está desarticulando y sobre el miedo”, ha referido.

“Cuando las sociedades se secuestran por el miedo la consecuencia es la violencia y en el mundo hay elementos que hacen vislumbrar lo que podría ser la degeneración futura del mejor modelo que ha creado la humanidad, el occidental”, ha aseverado el también catedrático de literatura española e hispanoamericana.

A juicio de la bailaora y también directora de este montaje, la danza flamenca está haciendo propuestas muy interesantes sobre asuntos actuales, lo que demuestra su enorme capacidad de evolución, lo que su compañía trata de plasmar desde hace muchos años.

“Todas las letras se trabajan muchísimo. En el flamenco tenemos la virtud de tener la música y la danza en una misma unidad, y en esta ocasión trabajamos sobre palos flamencos que en realidad son poesías” cantadas, ha subrayado.

María Pages ha reivindicado así el esfuerzo que hacen en este espectáculo los músicos flamencos y clásicos de la compañía para crear música original con una composición mixta que ofrece muchos matices.

“Trabajamos con una partitura clásica, normalmente escrita para piano y chelo, pero con guitara flamenca, violín y chelo, porque no tenemos piano”, una adaptación instrumental que ha supuesto un reto para nuestros músicos, ha desvelado Pagés, que subirá a las tablas del Cuyás acompañada por el cante de Ana Ramón y Cristina Pedroza y la guitarra, el chelo, el violín y la percusión de Rubén Levaniegos, Sergio Menem, David Moñiz y Txema Uriarte.

Frente a la “idea romántica y bella de la danza que figura en el imaginario colectivo”, El Harti ha defendido este arte “como conocimiento” porque “el hecho de que un bailaor suba al escenario es el resultado de un proceso profesional muy complejo en el que interviene el intérprete, un director de escena, un coreógrafo, un iluminador, un sonetista”, a lo que se suma la necesidad de contar con medios económicos, que en España, ha dicho, “hay que sacárselos del bolsillo en un 98 % en el mundo de la danza”. EFE