Santa Cruz de Tenerife (EFE).- El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha cerrado este miércoles el debate sobre el estado de la nacionalidad haciendo un llamamiento a la unidad de todas las fuerzas políticas para afrontar los retos a los que se enfrenta el archipiélago, y ha instado a desterrar la división entre las islas, que debilita a todos.
Clavijo ha situado la recuperación de renta media con España y de Europa como uno de los grandes retos del archipiélago, una convergencia que, aunque afirmó que no se logrará en cuatro años, es posible “desde la unidad, el esfuerzo, el compromiso y la transparencia”.
Altura de miras, generosidad, unidad, grandes acuerdos, interés general y esfuerzo son algunos de los conceptos repetidos por Clavijo en su última intervención en el debate, en la que respondía a los portavoces de los cuatro partidos que apoyan al Gobierno de Canarias, CC, PP, ASG y AHI, tras haberlo hecho el martes con los tres de la oposición.
Después de dos días de debate, en el que entre los ocho intervinientes no ha participado ninguna mujer, el presidente ha pedido a todos los grupos acuerdos para defender las mismas posiciones en las negociaciones para los presupuestos del Estado, la regla de gasto, la condonación de la deuda y el cambio legal sobre los migrantes menores de edad.
Reconoció que, “a pesar de las diferencias y de los chascarrillos”, en los ocho meses de legislatura ha habido “generosidad, compromiso y lealtad” por parte de todos.
“Nos toca vivir un momento histórico en el que hay que hacer un cambio de rumbo, tenemos que tener altura de miras y desde la diferencia poner por delante el interés general de Canarias”, dijo el presidente.
En su opinión, “todas las fuerzas políticas han dado muestra” de esa altura de miras, por lo que se mostró convencido de que se van a alcanzar “grandes acuerdos por el interés general de Canarias”.
Para Clavijo, “en el pasado podemos encontrar todas las excusas para el enfrentamiento y la crispación”, pero ahora de lo que se trata es de “poner los cimientos” y “los mimbres” para resolver los grandes problemas de Canarias, como son la pobreza y la productividad, lo cual no ocurrirá en cuatro años.
Destacó que el Gobierno de Canarias ya ha empezado con esa tarea y quiere hacerlo “al modo canario”, que, según dijo, consiste en “hacer partícipe a toda la sociedad en las grandes transformaciones que se necesitan”.
“El Gobierno no se va a rendir nunca, podemos cometer errores, pero el error de quedarnos paralizados no lo vamos a cometer”, garantizó.
Fernando Clavijo se mostró satisfecho con “los datos de empleo” en Canarias, pero afirmó que es necesario “mejorar las retribuciones para que la gente sea más próspera”.
Citó también la ejecución de los fondos Next Generation, cuyo límite es 2026, como otra de las grandes preocupaciones del Gobierno.
“Vamos a tratar de ejecutar el mayor número de fondos posible, va a ser difícil”, y se va a realizar “sin críticas al anterior ejecutivo”, aunque “no tenemos la garantía de llegar”, afirmó.
En cuanto a la divergencia de rentas de Canarias con España y Europa, que se profundiza desde principios de siglo, la justificó con que Canarias dejó de ser región objetivo uno de la Unión Europea, con la menor llegada de fondos por la ampliación comunitaria a los países del este y con “los incumplimientos sistemáticos del Gobierno de España con el REF”.
Ahora el reto es volver a converger y para eso “hay que ir por delante, hay que crecer más que la media española”, algo que se podrá conseguir, aunque no en cuatro años, “desde la unidad, el esfuerzo, el compromiso y la transparencia”, consideró Clavijo.
El presidente reivindicó “el poder” del Parlamento para ayudar al Gobierno a conseguir sus objetivos, porque la Cámara “debe tener un papel principal en los retos de Canarias”
“Necesitamos muchos acuerdos para abordar los retos”, entre los que citó las elecciones en Estados Unidos, las guerras en Ucrania y Gaza o los acuerdos de España con Marruecos “que no se nos explican”.
Mostró su preocupación con la posibilidad de que se hagan públicas las balanzas fiscales entre comunidades autónomas, algo que en su opinión es “una mala noticia para Canarias” y que “va a generar división y crispación en España”.
Por todo ello, “necesitamos unidad, serenidad, tranquilidad y debates sosegados y profundos”, insistió el presidente. EFE
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