Santander (EFE).- La criminalidad aumentó en Cantabria un 2,3 por ciento en el año 2023, arrastrada por el alza de la ciberdelincuencia, que fue del 24,6 %, una tendencia que también se observa en el conjunto de España.

Según el balance de criminalidad del año 2023 publicado por el Ministerio del Interior, casi uno de cada cuatro infracciones penales estuvieron relacionadas con la cibercriminalidad.

Cantabria cerró el año con 24.247 infracciones, de las que 18.261 corresponden a la delincuencia convencional (un 3,4 % menos que en 2022) y 5.986 son ciberdelitos.

El 90 % de esos ciberdelitos fueron estafas informáticas, que crecen un 25,2 % con respecto al año anterior.

Los delitos contra la libertad sexual también registraron un aumento del 12,1 %, que Interior vincula con una mayor disposición de las víctimas a denunciar.

En total fueron 157 delitos contra la libertad sexual, de los cuales 34 fueron agresiones sexuales con penetración, cinco menos que el año anterior.

Hubo diez homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa, uno menos que el año anterior, y 372 delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria, casi los mismos que en 2022.

Además, no se contabilizó ningún asesinato consumado (en 2022 hubo 1) y un año más no se produjo ningún secuestro.

Son significativos los incrementos del tráfico de drogas (un 37,3 %) y de las sustracciones de vehículos (un 38,4 %).

Los robos con violencia e intimidación subieron un 5,8 %, aunque descendieron los robos con fuerza, un 1,9 por ciento.