Toledo (EFE).- El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado una resolución para instar al Gobierno de España a modificar de urgencia las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura, porque una vez que está aprobado el nuevo plan de cuenca del Tajo con unos parámetros y condiciones distintas, no hay motivo para continuar con la normativa que “ya, a estos efectos, es ilegal”.
“Hay una nueva ley y hay que adaptar los reglamentos de las leyes para que la explotación del trasvase Tajo-Segura no tenga que esperar un año en su modificación”, ha afirmado el presidente castellano-manchego, Emiliano García-Page.
El presidente castellanomanchego ha explicado que va a promover las reuniones urgentes del Gobierno y de los consejos que tienen que informar la modificación del plan, para adecuar las reglas de explotación al nuevo plan hidrológico del Tajo que establece caudales ecológicos.
Ha recordado que “el mayor atentado al sistema sistema hidráulico de nuestra comunidad autónoma y a nuestros intereses del agua viene de la mano del memorándum ‘de la vergüenza’ que se firmó en la época de Cospedal, que es perfecto para que le hagan un monumento en el Levante y en Murcia, pero una humillación vergonzosa para esta tierra”.
El plan del Tajo se tiene que llevar a la práctica modificando las reglas del trasvase
Ese memorándum que, ha continuado Page, se ha “dinamitado a través de la modificación del plan de ordenación de los recursos hídricos del Tajo, ahora tiene que llevarse a la práctica en las reglas de explotación, no sea que alguien quiera agarrarse a la letra pequeña para seguir haciendo de su capa un sayo, o mejor dicho, del Tajo un río que desemboca en el Mediterráneo cuando todo el mundo sabe que desemboca en el Atlántico”.
Según García-Page, esta es la manera de proteger a los regantes y de que no falte agua para que se instalen empresas y se fije población en esta comunidad autónoma.
El presidente de Castilla-La Mancha también ha lamentado la demagogia de quienes, como hizo Ramón Tamames, dicen que por qué dejar que el agua del Tajo termine en Lisboa.
En ese sentido, ha respondido que al margen de que la ley obliga, decir eso es desconocer que el Tajo no presenta problemas en su desembocadura, sino que los está sufriendo en su zona media, porque una vez que pasa la provincia de Toledo se recarga en Gredos y desde allí hasta la desembocadura ya es otro Tajo.
