Toledo (EFE).- Las Cortes de Castilla-La Mancha han aprobado la reforma del reglamento del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno con el único apoyo del grupo socialista, ya que PP y Vox han votado en contra, pues mientras que el PSOE ha defendido que el cambio hace a este organismo «más fuerte, más independiente y más garantista», la oposición considera que pierde independencia.
La reforma del reglamento ha sido el primer punto del orden del día del pleno de las Cortes, tras el debate del documento en la comisión parlamentaria correspondiente, en la que se aprobaron 27 enmiendas parciales del PSOE y se rechazaron 10 de Vox, que se han mantenido vivas para su debate en la sesión plenaria, si bien tampoco han prosperado en esta ocasión.
La portavoz del grupo socialista en las Cortes, Ana Isabel Abengózar, que ha defendido el dictamen que se aprobó en la comisión -con el voto a favor del PSOE, la abstención del PP y el voto en contra de Vox-, ha subrayado que es una reforma «obligada por la ley», para adecuar el reglamento a la nueva legislación europea y española aprobada después de la creación del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno de Castilla-La Mancha y que atribuye a este consejo la calidad de Autoridad Independiente de Protección del Informante.
Un reglamento «adaptado a la nueva realidad»
De este modo, Abengózar ha incidido en que esta modificación «adapta el reglamento a la nueva realidad institucional del consejo, integrando la nueva figura de la autoridad independiente de protección del informante» y ha subrayado que lo hace «de una forma técnicamente rigurosa, jurídicamente coherente y políticamente responsable», ya que «evita contradicciones, duplicidades y vacíos legales».
Así, ha explicado que con esta reforma se unifica en un único órgano la defensa de la transparencia y la protección del informante y ha argumentado que no puede haber transparencia si no existe un canal para denunciar las irregularidades y no puede haber integridad pública sin un órgano independiente que garantice la seguridad de los denunciantes.
«No es un trámite técnico más, es un paso decisivo para consolidar un sistema de integridad robusto», ha defendido Abengózar, que ha abundado en que la reforma del reglamento, al atribuir al consejo de transparencia la responsabilidad de autoridad independiente de protección del informante «protege a quien denuncia, sanciona malas prácticas, impulsa la transparencia y fortalece la calidad democrática de Castilla-La Mancha».
En cambio, ha rechazado las críticas de la oposición, que acusan al PSOE de impulsar la pérdida de independencia del organismo, y ha criticado la «falta de trabajo» del PP, que no presentó enmiendas parciales y se opone a la reforma sin haber hecho propuestas formalmente, y a Vox por asegurar que se crean nuevos organismos, pues ha asegurado que no es así.
PP dice que el órgano pierde independencia
En cambio, la portavoz del PP en las Cortes regionales, Carolina Agudo, ha cuestionado que la reforma del reglamento se haya impulsado en estos momentos a pesar de que los cambios legislativos a los que alude Abengózar se produjeron hace un año y ha denunciado que el objetivo de este cambio es «asegurarse» que el consejo de transparencia «siga siendo monocolor», pues ha acusado a los socialistas de «querer controlar el relato».
Así, ha preguntado «qué independencia va a tener un presidente del consejo nombrado por el PSOE» y aunque ha matizado que «no cuestiona a las personas, sino el diseño» del sistema, ha insistido en cuestionar «qué confianza le va a dar al ciudadano denunciar al gobierno cuando sabe que el canal mediante el que denuncia depende del gobierno».
Por ello, ha advertido de que el consejo de transparencia pasará «de ser un pilar de rendición de cuentas a un mero instrumento partidista de Page», y ha justificado el voto contrario a la reforma por ser «un atropello legislativo» que «rompe con la independencia del órgano, la pluralidad y la imparcialidad del consejo y la profesionalidad que requiere» este órgano.
Vox ve «un trasfondo político»
De su lado, el diputado de Vox Luis Blázquez ha advertido de «un trasfondo político» en la reforma y ha incidido en que con la reforma se crea «una estructura para controlar» el consejo de transparencia, de forma que ha argumentado que su grupo vota en contra porque «multiplica la burocracia, debilita las garantías, porque politiza los organismos, crea estructuras duplicadas y consolida el bipartidismo» que a su juicio ha perjudicado al país y a Castilla-La Mancha.
En cambio, ha defendido que las diez enmiendas parciales que su grupo ha mantenido vivas para el debate de este jueves «son técnicamente coherentes y socialmente útiles», ya que «buscan depurar el texto y limpiarlo de artificios y anglicismos». EFE
