Barcelona, 29 sep (EFE).- La feria del libro española Liber celebrará del 5 al 7 de octubre en Barcelona sus 40 años de historia con una edición que recupera casi las cifras prepandémicas y que dará impulso a la apertura de nuevas fronteras a la producción editorial española.
Organizada por Fira de Barcelona y promovida por la Federación de Gremios de Editores de España, Liber reunirá novedades y fondos bibliográficos en los cerca de 300 expositores de 12 países, en los que “estarán representados desde grandes grupos a la pequeña y mediana editorial, pasando por la edición independiente, la científico-técnica y académica, o la más especializada en ámbitos como el libro religioso, didáctico, educativo o infantil-juvenil”, ha avanzado el nuevo director de Liber, Ángel Celorrio.
Colombia, país invitado de honor de la feria, aportará una muestra de 81 sellos editoriales, además de preparar actividades culturales y de negocio, buscando “incrementar la difusión internacional de su literatura más actual”.
La delegación colombiana estará integrada por una cincuentena de invitados, entre editores, libreros, distribuidores y representantes institucionales, que presentarán los incentivos para la traducción de autores colombianos en lenguas extranjeras.
Asimismo, habrá un concierto-lectura homenaje a Gabriel García Márquez, abierto a la ciudadanía barcelonesa, con motivo de los 40 años de la concesión del Premio Nobel; y se presentará la Feria Internacional del Libro de Bogotá FILBo, que en 2023 cumple 35 años, la Red de Ferias del Libro y el programa de internacionalización del sector del libro, “Reading Colombia”.
Además de Colombia, estarán también presentes instituciones públicas y entidades con participaciones colectivas de Madrid, Galicia, Andalucía, Barcelona, País Vasco, Asturias, Aragón, Castilla La Mancha, Castilla-León, así como sellos de Polonia, Italia, EEUU, Alemania, Emiratos Árabes Unidos, India, Chipre, Países Bajos, Kuwait e Irán.
Para generar oportunidades en nuevos mercados, Liber ha invitado directamente a más de 450 compradores y prescriptores clave de sesenta países, entre ellos importadores, distribuidores, libreros o compradores de derechos, así como responsables de organismos públicos y bibliotecas, agentes literarios y editores mayoritariamente de países latinoamericanos y europeos.
En ese grupo de compradores destaca miembros de 24 bibliotecas públicas norteamericanas que cuentan con grandes secciones de libros en español.
Como novedad, otro millar de profesionales internacionales, que no viajará a Barcelona, mantendrá entrevistas comerciales de forma virtual durante los días de la feria a través de una plataforma en línea.
El presidente de la Federación de Gremios, Daniel Fernández, ha recordado que las exportaciones del sector del libro español retrocedieron ligeramente un 0,7% hasta los 388,91 millones de euros, como consecuencia de las restricciones internacionales de circulación de bienes y personas durante la pandemia y el descenso de las ventas del sector gráfico, por lo cual “Liber se convierte en una oportunidad para revertir esta situación”.
Según el director ejecutivo de la Federación de Gremios de Editores, Antonio María Ávila, “en el Liber se hace un tercio de la exportación total, que coincide con los días de la feria, pero también con los meses que le siguen, hasta enero. Una buena edición -ha precisado- registra unos 100 millones de facturación”.
La industria del libro, la primera industria cultural de España, facturó 2.567,70 millones de euros el pasado año y editó cerca de 80.000 títulos.
En el programa del Liber, que espera a unos 7.000 visitantes profesionales, habrá 53 sesiones con 130 ponentes en las jornadas profesionales que abordarán cuestiones como la comercialización y promoción de los libros, la ecoedición y la sostenibilidad, la digitalización, la nueva normativa del depósito legal, la propiedad intelectual o la protección de la bibliodiversidad.
Con motivo de la feria, los editores entregarán el 6 de octubre en el MNAC los Premios Liber, que este año reconocen la trayectoria y el trabajo como editor de Pere Gimferrer, de la escritora Soledad Puértolas, el director de cine Benito Zambrano y los productores de la película “Pan de limón con semillas de amapola”, el periodista Ignacio Elguero, la librería Ramon Llull de Valencia y la Biblioteca Histórica del IES Isabel La Católica de Madrid.
