Las almunias o fincas próximas a las ciudades de Al Andalus fueron durante siglos, además de centros de producción agrícola, lugares para el solaz y para la ostentación de poder. Estaban provistas de albercas que además de para el riego tenían usos recreativos, como la de la Buhaira de Sevilla, en la imagen de archivo. EFE/Raúl Caro

Becan con 10 millones una investigación sobre la revolución verde islámica

Barcelona, 3 ene (EFE).- El Consejo Europeo de Investigación ha becado con 10 millones de euros un proyecto que estudiará la influencia de Al-Andalus y la conquista cristiana entre los siglos VI y XVI desde la óptica de los recursos medioambientales, la agricultura, el paisaje y la sociedad.

Se trata del proyecto “Repensar la Revolución Verde en el Mediterráneo occidental medieval, siglos VI-XVI”, que coordinará la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y en el que también participarán la Universidad de Granada (UGR), la University of Reading y la University of York (ambas en el Reino Unido), ha informado la UAB.

Durante seis años, el estudio analizará las transformaciones que se produjeron en la Edad Media, entre los siglos VI y XVI, en la gestión de los recursos y estudiará los efectos que tuvieron las conquistas cristianas en la península ibérica y en Baleares como motores de adaptación e innovación.

Asimismo, analizará el papel que tuvieron los cambios poblacionales en la transmisión de plantas, animales, nuevas dietas y técnicas agrarias, la determinación de las estructuras agrarias locales que se abandonaron y fueron sustituidas y las que se mantuvieron, los nuevos paisajes agrarios que se crearon y el papel del clima en relación con todos estos cambios, ha añadido la UAB.

En 1974, el historiador de la economía Andrew Watson popularizó el concepto “revolución verde islámica” basándose en fuentes escritas árabes y vinculó la difusión de 18 nuevos cultivos de origen oriental, algunos tropicales, con las conquistas árabes y las migraciones de población que acarrearon.

La difusión de estas plantas fue acompañada de la introducción de técnicas de irrigación necesarias para su aclimatación a regiones semiáridas o de clima mediterráneo y el resultado fue una intensificación del cultivo, que estimuló el crecimiento de la población y la reorganización económica del mundo islámico medieval.

La UAB ha indicado que mientras que la introducción de las técnicas hidráulicas y la creación de espacios irrigados en esa época han sido muy estudiadas en los últimos 30 años, la identificación arqueológica de las plantas ha avanzado poco.

Por ello, la universidad ha señalado que la investigación ampliará los ámbitos de estudio con el fin de determinar si la revolución verde islámica fue solo una cuestión de difusión de plantas y técnicas hidráulicas.

El proyecto ha ganado la convocatoria Synergy Grant del Consejo Europeo de Investigación, que es una de las más importantes a nivel europeo, por lo que recibirá 10 millones de euros para los próximos seis años.