Una persona utiliza un ordenador portátil. EFE/Sascha Steinbach

Las tecnologías cuánticas complican el trabajo a los piratas y garantizan la “ultraseguridad”

Madrid (EFE).- Las tecnologías cuánticas atraen inversiones millonarias de las administraciones públicas y de las grandes empresas y se sitúan como una de las más disruptivas porque van a revolucionar muchos sectores, entre ellos el de las comunicaciones; se lo van a poner muy difícil a los piratas informáticos y van a sentar las bases de una privacidad “ultrasegura”.

Intercambiar mensajes con total privacidad ha sido un desafío permanente durante siglos y la tecnología cuántica, mantienen los expertos, está reescribiendo las reglas de la física clásica y permitiendo hacer cosas que hasta ahora se consideraban impensables.

Aplicaciones múltiples

Las aplicaciones van a ser múltiples. Asegurarán las transacciones bancarias protegidas frente a ataques, la protección de los datos médicos, de las infraestructuras críticas -como la red de producción y distribución de energía-, las redes de comunicaciones o las instalaciones aeroportuarias, ha explicado a EFE Vicente Martín, catedrático de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y experto en computación e inteligencia artificial.

El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades impulsó el “Plan Complementario de Comunicaciones Cuánticas” (uno de los ocho que se han puesto en marcha para agilizar la investigación en áreas estratégicas) para reforzar la ciberseguridad a través de la investigación y de la tecnología; y ahora acaba de resolver la primera fase -la de diseño- de la primera misión geoestacionaria española de distribución de claves cuánticas (QKD, por sus siglas en inglés) para avanzar en la seguridad de las comunicaciones.

Algunas de las principales empresas españolas del sector aeroespacial (Thales Alenia Space España, Sener Aeroespacial o Telespazio Ibérica) han sido ya seleccionadas para proponer sus diseños, antes de pasar a una fase de construcción, verificación y validación de prototipos dentro de un proyecto que cuenta con una inversión que ronda los 125 millones de euros en España y que se suma a la iniciativa europea para crear una constelación de comunicaciones seguras por satélite.

“Qubits” contra “bits”


En el Plan Complementario de Comunicaciones Cuánticas participan, además del Gobierno, las comunidades de Cataluña, País Vasco, Galicia, Valencia, Castilla y León y Madrid, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y el Grupo de Investigación en Información y Comunicación Cuántica de la Universidad Politécnica de Madrid, que coordina el plan.

La explicación científica: la información cuántica -lo que ahora se denomina “qubits”- funciona de forma diferente a los “bits” clásicos y podría ser muy útil para tareas criptográficas que son impensables en el mundo de la física clásica; por ejemplo, la “distribución de claves cuánticas” (QKD) distribuye de forma segura claves de números aleatorios basadas en que la información transportada sobre sistemas cuánticos no se puede copiar.

El edificio "Rockefeller", primera sede del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
El edificio “Rockefeller”, primera sede del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). EFE/ Luis Millan

Un “hacker” no puede manipular los “qubits”

Así, un “hacker” no puede intervenir ni manipular los “qubits”, por lo que ese tipo de claves son la base para que las comunicaciones sean “ultraseguras”, según el Grupo de Investigación en Información y Comunicación Cuántica de la UPM, considerado como uno de los pioneros a nivel mundial en la aplicación de esa “criptografía cuántica”.

El catedrático Vicente Martín, coordinador del Grupo de Investigación en Información y Comunicación Cuántica (GIICC) de la UPM, ha destacado los grandes beneficios que estas tecnologías van a reportar a la sociedad en los ámbitos de la computación, la comunicación y la metrología.

“Los ordenadores cuánticos nos permitirán resolver problemas matemáticos a una velocidad inalcanzable por un ordenador clásico o solucionar problemas para los que ahora no hay solución; desde problemas financieros hasta sistemas físicos inaccesibles, y eso permitirá estudiar las propiedades de nuevos materiales o encontrar nuevos fármacos”, ha explicado a EFE.

Y ha asegurado que con la criptografía cuántica “podemos estar seguros que no podrán acceder a nuestros datos”, porque su seguridad reside en las propias leyes de la física cuántica y los protocolos en que se basa son “inmunes” al ataque desde cualquier tipo de ordenador (cuántico o clásico), lo que supone “un cambio de paradigma, a todos los niveles, para las comunicaciones del futuro”.

Aspecto del supercomputador MareNostrum5
Aspecto del supercomputador MareNostrum5 del Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS). EFE/Enric Fontcuberta

Tecnología cara para proteger información también valiosa

Se trata todavía de una tecnología cara, “que sólo se justifica si la información que queremos proteger es también valiosa”, ha observado Vicente Martín, pero está convencido de que, como cualquier tecnología puntera, a medida que avance se irán abaratando los sistemas y llegando cada vez a más usuarios, pero ha insistido en la importancia de empezar a cambiar ya toda la criptografía por otra que sea resistente a los ataques.

El Plan Complementario de Comunicaciones Cuánticas, ha detallado el catedrático de la UPM, se enmarca en otras acciones europeas de gran envergadura, como la EuroQCI (European Quantum Communication Infrastructure), la futura red de comunicaciones basada en tecnologías cuánticas que unirá toda Europa de manera segura.

A su juicio, se trata de tecnologías “críticas” para que Europa pueda mantener su soberanía e independencia tecnológica frente a terceros, y ha subrayado que durante la pandemia se puso de relieve la importancia de las tecnologías, no sólo en cuanto a medios de producción, también para proteger y garantizar la seguridad de las comunicaciones.