Madrid (EFE).- La Comunidad de Madrid ha comenzado la tramitación de la deflactación de la tarifa autonómica del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), con la que el Ejecutivo autonómico prevé ahorrar 153 millones de euros a los 3,5 millones de contribuyentes madrileños.
El anteproyecto ha sido publicado este lunes en el Portal de Transparencia, como paso previo antes de someterlo a la próxima aprobación del Consejo de Gobierno y, posteriormente, remitirlo a la Asamblea de Madrid para su aprobación.
El objetivo es que entre en vigor este año y que las familias puedan beneficiarse de esta rebaja fiscal en la próxima declaración de la renta en 2024.
El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso aplicará por segundo año consecutivo la medida, que se prevé que esté en vigor en la próxima declaración de la Renta, correspondiente a 2023, y será aplicando a todos los tramos, al mínimo personal y familiar, las deducciones vigentes y el límite de renta de las mismas.
El porcentaje aplicado será del 3,1 %, correspondiente con la subida media del IPC durante los ocho primeros meses de este 2023.
Según el Ejecutivo autonómico, la deflactación del IRPF beneficiará nuevamente a las rentas más bajas ante la escalada de la subida de los precios, ya que dota “con mayores recursos económicos a las familias madrileñas”, evitando que las subidas salariales les supongan un mayor pago de impuestos al pasar de su actual tramo a uno superior.
La Comunidad de Madrid ha iniciado la tramitación de esta iniciativa fiscal, una medida recogida en el programa electoral de Díaz Ayuso y que seguirá beneficiando a los contribuyentes siempre que la inflación se sitúe por encima del 2 %.
