Coches patrulla de la Guardia Civil y Policía Nacional . EFE/ Mariscal

La Audiencia de Valencia ordena buscar y detener a los dos fugados por violar a una menor

València (EFE).- La Audiencia Provincial de Valencia ha ordenado la búsqueda, detención e ingreso en prisión de los dos hombres condenados a veinte y doce años de prisión, respectivamente, por violar en grupo a una menor de edad en una localidad de la comarca de la Vall d’Albaida en septiembre de 2020.

La Sección Quinta ha tomado esta decisión este martes por medio de dos autos, después de que los dos penados no comparecieran en la vista convocada este lunes, en aplicación del artículo 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (Lecrim), para analizar la posible adopción de la medida de prisión provisional tras la sentencia dictada el pasado 30 de junio.

Según el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, en el caso del condenado a doce años de cárcel, la Unidad Sirene de Cooperación Internacional de la Dirección General de la Policía ha comunicado el incumplimiento de la medida cautelar de prohibición de salida de España que pesaba contra él.

La Sala ha dictado respecto a este hombre tanto la búsqueda, detención e ingreso en prisión en el territorio nacional como la emisión de una orden de detención europea con extensión internacional.

Respecto al condenado a veinte años de cárcel, se ha dictado un auto en el que decreta su búsqueda, detención e ingreso en prisión por no asistir a la comparecencia prevista en el artículo 505 de la Lecrim que se había señalado el pasado lunes, sin justificar la imposibilidad de hacerlo y al hallarse en paradero desconocido.

Orden internacional

La acusación particular denunció este lunes la fuga de los dos condenados y pidió junto con la Fiscalía que se dictara una orden europea de detención y otra de búsqueda y captura internacional contra ellos.

Según informó a EFE el letrado Juan Molpeceres, el primero de estos hombres, ambos de nacionalidad búlgara, fue localizado e identificado por la policía alemana en la frontera entre Austria y este país, al entrar a la región de Baviera.

La Sección Quinta de la Audiencia de Valencia impuso a cada uno de los penados doce años de prisión como autores de un delito de abuso sexual a menor de 16 años. A uno de ellos, además, le impuso otros ocho años de cárcel por un segundo delito de abuso sexual, cometidos todos ellos durante y después de una celebración a la que asistieron junto a decenas de compatriotas.

Imagen de la fachada de la Ciutat de la Jústicia de València.EFE/ Kai Forsterling

Los hechos ocurrieron en 2020

Los hechos ocurrieron la noche del 27 de septiembre de 2020, cuando la víctima acudió a la fiesta junto a una amiga y en ella coincidió con los dos individuos condenados y un número indeterminado de personas, la mayoría de ellos, hombres.
Inicialmente fueron detenidos diez de los asistentes a esta fiesta, aunque finalmente la acusación se concretó sobre cuatro de ellos.

Tal y como recoge la sentencia, la menor tomó bebidas alcohólicas que afectaron a sus capacidades físicas y a su voluntad y comenzó a bailar con penados, quienes eran plenamente conscientes del estado en que se encontraba y de la edad que tenía.

A continuación, bien llevada o bien acompañada por ellos, la víctima se encontró en un lugar conocido como ‘el muro’, que es una zona apartada, aunque no lejana del sitio en el que se celebraba el baile. Allí, los dos condenados la violaron de forma simultánea.
Poco después de estos hechos, cuando la víctima ya estaba llegando a la casa donde iba a pasar la noche, recibió varios mensajes de uno de los condenados en los que éste le proponía hacer un trío.

La menor acudió con ese acusado a una casa deshabitada de la misma localidad donde se encontró con el otro participante en el trío, que había sido invitado por el anterior.

Uno de ellos, que ha resultado absuelto, se fue en cuanto agredió sexualmente a la niña, a la que no conocía previamente de nada.

Por el contrario, el otro continuó abusando de ella hasta la siete de la mañana, cuando se fueron a sus respectivas casas.

La víctima no sufrió lesiones físicas, pero sí daños morales y denunció los hechos ante la Guardia Civil en compañía de su madre. Por los daños morales causados se les impuso una indemnización a la víctima de 50.000 euros.