València (EFE).- Un verano «extremadamente cálido» en la Comunitat Valenciana, con temperaturas 2,2 grados más altas que el promedio normal, y con un «ligero déficit» de precipitaciones ha dado paso a un otoño «cálido» y sin una «tendencia clara» sobre las precipitaciones, que si se producen podrían concentrarse en unos días y dentro de un periodo seco.
Así lo ha asegurado este miércoles el delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la Comunitat Valenciana, Jorge Tamayo, quien en rueda de prensa ha informado del resumen del verano climático 2025, el balance del año hidrológico y la tendencia de la predicción estacional.
Con respecto al año hidrológico, que empezó el 1 de octubre de 2024 y finaliza dentro de una semana, ha sido «húmedo», con un acumulado de 611,6 litros por metro cuadrado, lo que supone un 22 % de precipitaciones por encima de lo normal (500 l/m2) y concentradas en dos episodios: el de la dana del pasado 29 de octubre y en la primera mitad de marzo.

Predicción de otoño
Respecto a la estación de otoño, que comenzó el 22 de septiembre y finalizará el 21 de diciembre, Tamayo ha señalado que se espera que sea cálido, con temperaturas «por encima» de las normales, y respecto a las precipitaciones ha dicho: en estos momentos «no hay nada que nos indique si vamos a estar por encima o por debajo de los valores normales de lluvia».
Según Tamayo, «una semana antes se puede empezar a ver que la situación puede empezar a producirse, pero no exactamente dónde sino en un entorno de posibilidades», y ha asegurado: «Si me preguntan si va a haber gota fría, a una semana vista no estamos viendo nada, pero no sé lo que va a pasar dentro de un mes, ni yo ni nadie en el mundo, y quien diga lo contrario, miente».
«Aunque sabemos que en el otoño aquí, como pasó el año pasado y ya ha ocurrido otras veces, las lluvias pueden concentrarse en muy pocos días y, dentro de un periodo seco, puede haber precipitaciones muy importantes que puedan hacer que globalmente el carácter sea húmedo. Pero ahora mismo no está clara la tendencia en cuanto a precipitaciones», ha añadido.

El verano climático
El verano climático 2025 (junio-julio-agosto) ha sido el más cálido y el trigésimo quinto más seco desde 1950.
Ha resultado extremadamente cálido y con ligero déficit de precipitación en la Comunitat Valenciana, con una temperatura media de 25,5 grados, 2,2 grados más alta que la del promedio normal (23,3º).
En junio se registró la primera ola de calor del verano, con temperaturas muy anómalas, de hasta casi 4 grados más, que se prolongaron hasta los primeros días de julio, mientras que en los ocho últimos días de julio se registraron los días más frescos de la estación, con una temperatura 2,2 grados más baja de la media de referencia.
Agosto fue el segundo más cálido, tras 2012, determinado por la larga ola de calor entre los días 3 y 18, que tuvo dos picos, el primero centrado en el día 11 y el segundo, más intenso, en los días 17 y 18, con máximas de hasta 45,5 grados.
Fuera del trimestre veraniego, septiembre está teniendo un carácter muy cálido sobre todo por las temperaturas de las tres primeras semanas, ya que a partir del lunes 22 se produjo un significativo descenso térmico, con tendencia a recuperarse las temperaturas los últimos días del mes.
Tamayo ha advertido de que el calentamiento del aire está dando lugar a un calentamiento de la temperatura del agua del mar, y según datos de Aemet, en la boya de València de Puertos del Estado se registró durante este verano la temperatura más alta en un mes de junio (27.82 °C el día 30) y la más alta en un mes de julio (28.92 °C el día 4).
Respecto a las precipitaciones en verano, la cantidad acumulada ha sido de sido 55.8 l/m2, que es un 7 % inferior a la de la climatología de referencia (60.0 l/m2); la mayoría de las precipitaciones del trimestre se registró en julio.
Septiembre está teniendo un carácter similar a agosto, con tormentas de corta duración y muy focalizadas en áreas relativamente reducidas, que han provocado granizadas y reventones húmedos.

Año hidrológico
A falta de una semana para finalizar, el año hidrológico 2024-2025 está teniendo un carácter húmedo en la Comunitat Valenciana y el superávit pluviométrico medio es del 22 % ya que, en promedio, durante los últimos doce meses se han acumulado 611.6 l/m2 cuando lo normal sería 499.7 l/m2.
Mientras que en Castellón es, junto con el año hidrológico 2019-2020, el más húmedo del siglo, con un superávit medio provincial del 39 %, en Alicante hay un déficit pluviométrico del 13 %, y en Valencia, el superávit es del 28 %, aunque con grandes contrastes entre el litoral y el interior norte.
La evolución temporal de la precipitación durante el actual año hidrológico muestra cómo gran parte se acumuló en dos episodios: el catastrófico de final del mes de octubre y el de la primera mitad de marzo, en el que más que la intensidad, la característica fue la persistencia.