La actriz María Adánez y el actor Pepón Nieto durante el pase gráfico de la obra "¡Ay Carmela!". EFE/J.P. Gandul

“¡Ay, Carmela!”, memoria histórica viva con María Adánez y Pepón Nieto

Madrid (EFE).- “¡Ay, Carmela!” es un “texto contemporáneo con voluntad de clásico”, coinciden en señalar los actores María Adánez y Pepón Nieto, que personifican a Paulino y Carmela en la obra de José Sanchís Sinisterra, que dirige José Carlos Plaza.

El Teatro Bellas Artes de Madrid acoge desde hoy al 11 de junio la historia de estos cómicos, “Carmela y Paulino, variedades a lo fino”, que en 1938, en plena Guerra Civil, van de pueblo en pueblo y a causa de un involuntario error acaban representando una obra para las tropas franquistas.

Pepón Nieto apunta que Carmela lleva “la alegría como bandera, más ingenua y atrevida que Paulino, que es más cagón -como le dice ella-, en realidad, más realista”, dice a EFE el actor.

La actriz María Adánez y el actor Pepón Nieto durante el pase gráfico de la obra "¡Ay Carmela!".
La actriz María Adánez y el actor Pepón Nieto durante el pase gráfico de la obra “¡Ay Carmela!”. EFE/J.P. Gandul

Nieto subraya que Sanchís Sinisterra escribió la función cuando el concepto de “memoria histórica no existía. El gran precio que pagan los vencidos es el del olvido y él habla de no olvidar; ese es el precio que tuvieron que pagar los vencidos y aguantar que el vencedor les pusiera el pie en el cuello”.

El actor incide en que el eje de la función es hacer memoria “no solo para no repetir sino por dignificar lo que ocurrió, para que se sepa lo que pasó”.

María Adánez apunta que se trata de un montaje “muy auténtico, honesto, humilde, sencillo”, dentro de la complejidad que tiene la función, en la que han intentado reproducir, “de la manera más cercana posible”, cómo podía haber sido ese momento en la actualidad.

Una función en la que el drama cede paso a la comedia

Una función en la que la profundidad dramática cede paso a la comedia, “un texto que continúa muy vigente, no solo por la guerra de Ucrania, sino porque hace un llamamiento al peligro que suponen los nacionalismos; vivimos un momento muy polarizado y trivializado a través de las redes sociales, donde pierden fuerza acontecimientos muy importantes”.

La actriz rechaza la actitud de “ciertos dirigentes que manipulan a la sociedad, y eso está en la función, en la que hay un llamamiento a no matar por ideales. No se puede consentir nunca una guerra, es lo peor; aunque haya un ganador hay una pérdida como sociedad”.

Ambos actores apuntan que el texto hace un homenaje a su profesión: “no todo vale dentro, viene a decir Sinisterra, el arte tiene que estar fuera de las ideologías porque entonces no sería arte”, indica Adánez.

Nieto añade que en aquel momento “el público necesitaba el aliento del cómico, que ponía el alma y el corazón en sacar una sonrisa a los espectadores, a pesar de estar inmersos en una guerra, con hambre, frío y terror a perder la vida”.

La actriz María Adánez y el actor Pepón Nieto durante el pase gráfico de la obra "¡Ay Carmela!".
La actriz María Adánez y el actor Pepón Nieto durante el pase gráfico de la obra “¡Ay Carmela!”. EFE/J.P. Gandul

Carlos Saura llevó al cine “¡Ay, Carmela!” en 1990

“¡Ay, Carmela!” obtuvo en 1999 el Premio Max a la mejor autoría teatral y se llevó a la gran pantalla en 1990 de la mano del director Carlos Saura, protagonizada por Carmen Maura y Andrés Pajares. Su primera representación teatral fue en 1987 con Verónica Forqué -actriz con la que María Adánez ha compartido desde sus comienzos rodajes y series de televisión- y Santiago Ramos, su padrastro, también fallecido.

En el apartado emocional esta coincidencia le ha llevado a vivir “un momento muy espiritual, porque en la sala en la que ensayábamos estaba el cartel de la obra con la imagen de los dos”.