Pamplona (EFE).- Pamplona respira osasunismo por los cuatro costados a pocas horas del inicio de la final de la Copa del Rey que disputarán Osasuna y Real Madrid en el estadio de La cartuja de Sevilla.
Este partido histórico para Osasuna se podrá vivir también desde la Plaza del Castillo, donde desde primera hora se están instalando cuatro pantallas gigantes que convertirán este espacio en el epicentro de la fiesta rojilla.
Se trata de cuatro pantallas led, de 5 por 3 metros de tamaño cada una, rodeando el kiosco de la plaza, lo que permitirá a los aficionados ver el partido desde cualquier punto.
Aunque el partido comenzará a las diez de la noche, dos horas antes se iniciará la fiesta en este lugar, donde habrá animación musical y de vídeo con un DJ.
Además, esta plaza situada en el corazón de Pamplona ha sido engalanada con cartelería en todas las farolas que rodean el espacio central, con el lema “Pamplona con Osasuna”. Ya el viernes, el Ayuntamiento desplegó una camiseta gigante en la fachada de la Casa Consistorial, sumándose así a las muestras de ánimo de la ciudadanía.
Este sábado, al atardecer, tanto la fachada del Ayuntamiento como el Caballero Dominante de la Ciudadela se iluminarán de rojo y azul, en honor a Osasuna.
Ante la previsión de una afluencia masiva a la Plaza del Castillo y, por extensión, al centro de la ciudad durante el partido y las horas previas y posteriores, se ha previsto una serie de medidas de refuerzo en materia de seguridad, que incluyen un dispositivo policial conjunto de Policía Municipal de Pamplona, Policía Foral y Policía Nacional.
La zona de la Plaza del Castillo tendrá igualmente un puesto de asistencia sanitaria, que contará con una ambulancia medicalizada a cargo de la DYA.
El rojo que identifica a Osasuna está presente además por doquier en la ciudad en las camisetas del equipo con las que niños y mayores han salido a la calle este sábado para mostrar su apoyo al club, que aspira al primer título oficial de su historia.
Entre tanta camiseta roja, una blanca del Real Madrid que porta una joven obligada por sus “amigas” que celebran su despedida de soltera por el centro de la ciudad. ¿Quién dijo miedo?.
