Paula Lerín
Valencia (EFE).- Esther Romero, entrenadora de la selección valenciana sub-12 femenina y vecina de Aldaia, vio cómo la dana arrasaba su garaje y el trastero donde guardaba dos de sus trofeos más preciados: las Copas de la Reina que había ganado con el FC Barcelona. Unos trofeos que fueron recuperados y, casi un año después, confiesa que se han convertido para ella en “un recuerdo doble emotivo”.
A través de un tuit en ‘X’, la pareja de la exfutbolista, Carla Martínez, lanzó una petición a la Real Federación Española de Fútbol para que no fuera una campeona sin trofeos. La respuesta llegó rápida y la RFEF decidió entregarle las réplicas de aquellos trofeos que quedaron destrozados y llenos de barro.
«Es bonito porque recuerdas todo, no solo el título»
“Es bonito porque recuerdas todo, no solo el título”, explicó la exjugadora del Barcelona y el Valencia en una entrevista con la Agencia EFE en la que se mostró agradecida con todo el apoyo recibido. Hoy, las copas lucen en una estantería del salón como símbolo de resiliencia.
Como seleccionadora, Romero dirigirá este domingo en Massanassa a un combinado formado por niñas procedentes de las localidades afectadas en el Torneo ‘Tornem!’, una iniciativa organizada por la Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana y la Agencia EFE para conmemorar la superación colectiva tras la dana, con la participación de los equipos alevines del Levante, Valencia, Villarreal, Elche y Castellón.
Pregunta: Fue una de las miles de personas afectadas por la dana en Valencia. ¿Cómo vivió aquellos días?
Respuesta: Ahora lo veo y pienso: lo que hemos pasado… En el momento fue un ‘shock’ porque entró el agua por todos lados, no puedes hacer nada y ya lo has perdido todo. Por suerte, en mi caso solo fue el garaje y el trasero, pero aún están en obras. Tengo amigos que no tienen ni garaje, ni ascensor… Es desastroso. Ahora cuando llueve tenemos más miedo de lo normal.
La Federación Española y la Catalana
P: La RFEF quiso tener un gesto con usted regalándole las dos réplicas de las Copas de la Reina que ganó con el Barça. ¿Les ha buscado un buen hueco en casa?
R: Tanto la Federación Española como la Catalana (perdió también los trofeos de la Copa Catalunya) me escribieron por la noche del mismo día que se puso el tuit. Se hizo viral, viral… A veces las redes sociales tienen cosas buenas. La Federación Española hizo todo lo posible para que pudiese ir y entregármelos. Me acuerdo que les dije que no sabía si iba a poder ir porque había perdido el coche, estaba en el garaje inundado, y en dos semanas estaban ya los trofeos en casa. Los tengo puestos en el comedor, en una estantería especial para ellos. Antes los tenía en el trastero porque hacía poco me acababa de mudar, pero ahora ya tienen su sitio y es bonito porque recuerdas todo, no solo el título. Es doble emotivo. Una de esas copas la conseguimos catorce años después de ganar la última, era muy significativa.
P: ¿Cómo está Aldaia casi un año después?
R: Está mucho mejor, ya no tenemos ese barro color sepia bajo el que vivíamos cuando pasó todo. Pero, por ejemplo, los túneles aún están por arreglar, el tren llega hasta Aldaia y no hay más vía hacia Buñol. Hay cosas que están destrozadas aún y costará arreglarlo, pero la vida en sí no está tan mal, ya está casi todo arreglado. Lo peor son las pérdidas humanas, que es irreparable.

P: Como seleccionadora sub-12, tiene una visión privilegiada sobre el crecimiento del fútbol femenino base. ¿Cómo ve la evolución de las niñas en el fútbol valenciano?
R: Hay muchísimas más fichas, por lo que hay muchas más niñas y el nivel es más alto. Antes no tenías donde elegir, ahora está más repartido en más ligas y las niñas están en un sitio más cómodo que antes porque los clubes apuestan por ellas. Cuando ves a todos los equipos sub-12 y ves la calidad que tienen esas niñas, dices: el futuro está bien servido.
P: ¿Ve muchos cambios entre su época y la actual?
R: Sí. Cuando jugaba éramos doce equipos de fútbol siete en toda Cataluña. Ahora hay doce equipos en un grupo de la Liga Valenta alevín y luego hay seis o siete grupos más. Si hay muchos más clubes que apuestan por el fútbol femenino, esas niñas están mejor formadas y, al fin y al cabo, salen niñas más buenas. Una de las cosas más importantes que yo veo es que, tristemente, a las chicas las entrenaba el padre de, el hermano de, para sacarse un dinerito. Ahora quiénes entrenan a chicas ya tienen una formación y se nota mucho. A mí me ha entrenado el padre de una jugadora o el hermano de otra y no tenían titulación. Cambia mucho.
La profesionalización del fútbol femenino
P: ¿Siente que la profesionalización del fútbol femenino está llegando también a las categorías formativas?
R: Creo que sí. Cuando iba a la selección no vivía lo que viven ahora las niñas. Son muchísimo más profesionales que lo que era yo, pero porque lo veía como un ‘hobby’. Ellas ven que pueden ser Aitana o Alexia y vivir del fútbol. Cuando jugaba nunca pensaba que iba a vivir del fútbol y ellas ahora quieren ser futbolistas, tienen sueños relacionados con el fútbol, por eso son más profesionales.
Antes era como fácil llegar a la Primera División porque éramos cuatro gatos. Pero ahora la que lo tiene claro se lo toma muy en serio y de manera más profesional. Yo veía a Marta la brasileña como algo lejísimos. Escuchaba hablar de Mia Hamm, pero no podías ver ni un partido suyo. No pensabas en ser Marta porque Marta solo era esa, la brasileña. Pensaba que Xavi era muy bueno, pero como no soy un chico, pensaba: nunca voy a jugar como Xavi. Ahora tenemos jugadoras como Aitana y Alexia que son de aquí y tienen la suerte de poderlas ver, poderlas tocar. Son reales y a las niñas les motiva muchísimo.
P: ¿Cómo viven las niñas esta oportunidad de competir con la selección valenciana en el Torneo ‘Tornem!’ después de un suceso tan duro?
R: Me parece un torneo atractivo porque podemos disfrutar todos. Vi a las niñas nerviosas, porque se acaban de conocer muchas, y me parece emotivo recordar ese día tan malo que vivimos y que hemos superado. Está hecho para que los niños, que también sufrieron muchísimo, disfruten. El deporte cura mucho y que se hagan estas cosas es bueno para todos como sociedad.