Un hombre practica paddle surf en aguas de la isla de Tabarca donde cientos de bañistas disfrutan desde primera hora de este domingo de las playas y calas en el primer fin de semana de julio, un mes donde las reservas hoteleras en la Comunitat Valenciana ya se han disparado hasta el 80 por ciento y se espera que suban conforme avance el calendario. EFE/Pablo Miranzo

Pleno de bañistas el primer fin de semana de julio en las playas y calas de Tabarca

Alicante (EFE).- Cientos de bañistas disfrutan desde primera hora de este domingo de las playas y calas de la isla de Tabarca de Alicante en el primer fin de semana de julio, un mes donde las reservas hoteleras en la Comunitat Valenciana ya se han disparado hasta el 80 por ciento y se espera que suban conforme avance el calendario.

Sombrillas, neveritas, chanclas, gorras y gafas de sol son algunos de los artículos imprescindibles para los muchos visitantes que desde bien temprano llegan desde la península a bordo de las ‘tabarqueras’ en una jornada despejada con intenso calor y humedad, ideal para el ‘sol y playa’ y para degustar la típica gastronomía del islote, como el arroz caldero.

Desde la asociación de vecinos Isla Plana de Tabarca, su secretaria, Ana Valera, ha explicado a EFE que el auge de visitantes lo han notado durante los dos últimos fines de semana, especialmente a partir de las fiestas patronales locales, del 28 al 30 de junio por San Pedro.

Vista general tomada con un dron de la isla de Tabarca. EFE/Pablo Miranzo

La isla multiplica su población en verano

Destino de muchos amantes del buceo en superficie, con gafas y tubo, decenas de embarcaciones recreativas fondean en torno a esta isla que estos días multiplica por mucho su población desde los poco más de 70 vecinos que tiene los meses de invierno.

De sólo 0,3 kilómetros cuadrados de superficie, Tabarca se ubica en un enclave privilegiado dentro de la reserva marina más antigua de España, de 1986, cuyos fondos albergan ejemplares de la mitad de las especies de flora y fauna mediterráneas (unas 7.000) a lo largo y ancho de 1.400 hectáreas sumergidas con extensas praderas de posidonia oceánica.