Madrid (EFE).- El presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), Javier Gándara, ha alertado este viernes sobre la posibilidad de que algunas compañías reduzcan rutas y/o frecuencias si el Gobierno sigue retrasando los pagos por compensaciones para los residentes en Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla.
En una rueda de prensa, Gándara ha denunciado la escasa dotación presupuestaria para estas compensaciones, porque faltan por abonar 425 millones de 2024 y en 2025 se devengarán otros 1.250 millones, mientras que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) recogen una partida de 560 millones para este año, los mismos que el pasado.
Quedan 175 millones para cubrir las compensaciones de 2025
Según explica ALA, una vez que se resten de los 560 millones presupuestados para este año los 385 millones de 2024 ya abonados, quedan tan solo 175 millones para cubrir las compensaciones de todo 2025 y los 425 millones pendientes de 2024.

No se trata de un problema de gestión o administrativo, sino que es falta de dotación presupuestaria por parte de Hacienda, ha dicho Gándara, quien ha incidido en que, de no subir esa aportación, «a algunas compañías no les va a quedar mas remedio que reducir frecuencias o rutas».
Mientras tanto, las líneas aéreas han aumentado su oferta con las islas desde antes del covid: en un 13 % en el caso de Baleares (55 millones de asientos en 2024) y en un 18 % con Canarias (62 millones de asientos).
«Nunca hubo tan buena conectividad con las islas», que se podría «poner en peligro por esos impagos», ha recalcado.
Aumento del tráfico aéreo este verano del 6 %
Las aerolíneas que operan en España tienen programados para el verano, temporada que para ellas empieza en abril, 245,9 millones de asientos, el 5,9 % sobre los 231,1 millones efectivamente ofertados en el verano 2023-2024.
El presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), Javier Gándara, ha avanzado este viernes en rueda de prensa que es probable que en 2025 se superen los 309 millones de viajeros con que cerró 2024, en récord histórico, aunque cree que la cifra de crecimiento será algo inferior al 6 % de la temporada de verano.
En Canarias, las previsiones apuntan a un incremento de la capacidad den verano del 11 %, el doble que la media nacional.
No obstante, el presidente de ALA ha mostrado cautela por los factores externos que podrían condicionar la buena marcha del tráfico aéreo, como la evolución de la situación económica y geopolítica inestable actual marcada por los conflictos bélicos.
Un crecimiento del 6,6 % en invierno
En la temporada de invierno, que termina a finales de marzo, se transportaron 111,3 millones de pasajeros, un 6,6 % más que un años antes, lo que significa volver a pulverizar los récords anteriores.
Todos los segmentos crecieron pero lo hizo especialmente el intercontinental, un 15 %, con 11,6 millones de pasajeros; el doméstico alcanzó los 36,6 millones y el tráfico intraeuropeo, 63,12 millones.

El número de vuelos comerciales subió un 6 % sobre el invierno anterior y sumó casi 830.000, y la carga aérea creció un 12 %, hasta más de 550.000 toneladas transportadas.
Para llegar a esas cifras Gándara confía en que no se vuelva a dar la congestión del tráfico aéreo que afectó al tráfico el verano pasado e hizo acumular retrasos en ruta del 50 %, especialmente en Francia y Alemania, porque especialmente el primero es paso obligado para las aerolíneas españolas en sus vuelos hacia Europa.
Además, las aerolíneas chocan con un problema creciente en la fabricación de aviones, ya que los grandes constructores (Boeing y Airbus) acumulan retrasos que les impiden entregar en tiempo las aeronaves para cubrir la creciente demanda.
Esta menor disponibilidad de aparatos explica, según sus cifras, un 30 % de los retrasos que se producen en los vuelos, aunque no cree que pueda llegar a provocar una caída del tráfico aéreo.
Sanciones de Consumo
Ha asegurado también que las sanciones de Consumo a las aerolíneas por cobrar a los pasajeros el equipaje en cabina sigue su curso judicial pero ha defendido esta práctica, que permite más «eficiencia y dar al consumidor la opción de no pagar por ello».
Según su explicación, en un avión de corto y medio radio caben en cabina unas 90 maletas pero tiene 180 asientos, con lo que los últimas en llegar deben bajarse a la bodega del avión y causan retrasos en los vuelos, en algunos casos de hasta el 90 %.
Gándara ha afirmado que los pasajeros conflictivos son un problema creciente, por lo que ALA trabaja con la Agencia de Seguridad Aérea (AESA) y con el Ministerio del Interior para buscar soluciones a este asunto, que provoca en ocasiones desvíos de vuelos a aeropuertos alternativos y afecta al rendimiento.