Barcelona (EFE).- La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha activado a 117 efectivos y 25 vehículos que se desplegarán en Barcelona en el dispositivo para contener el brote de peste porcina africana, a raíz de la petición de la Generalitat.
Según han informado fuentes de la Delegación del Gobierno en Cataluña, la mayor parte del contingente de la UME que se activará en este dispositivo procede de las unidades del Grupo de Intervención de Emergencias Tecnológicas y Medioambientales (GIETMA), de Torrejón de Ardoz, y del IV Batallón, con base en Zaragoza.
Según han detallado a EFE fuentes militares, la mayor parte de los efectivos han salido a primera hora de esta mañana desde el cuartel general de la UME en Torrejón de Ardoz y la previsión es que lleguen a Barcelona hacia el mediodía.
No obstante, las primeras unidades del GIETMA de la UME se desplazaron ayer a Barcelona, una vez se coordinaron con la Generalitat los apoyos a prestar, según las fuentes.
Coordinación y dirección de la Generalitat
En el marco de la colaboración entre instituciones, el delegado del Gobierno en Cataluña, Carlos Prieto, comunicó el fin de semana a la Generalitat que había unidades de la UME disponibles y con la capacitación oportuna para ponerse a disposición de la administración catalana, tanto en trabajos técnicos como veterinarios sobre el terreno.

El dispositivo para luchar contra este brote de peste porcina lo coordina y dirige la Generalitat, que ayer formalizó la petición de apoyo a la UME.
Según las fuentes de la Delegación del Gobierno, Prieto mantiene un seguimiento «permanente» tanto del despliegue operativo de la UME como de la evolución del brote, en coordinación directa con el ministerio y la conselleria de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación.
También es permanente la comunicación entre el delegado del Gobierno con el presidente de la Generalitat, Salvador Illa; y los consellers de Presidència, Agricultura e Interior, Albert Dalmau, Òscar Ordeig y Núria Parlon, respectivamente.
Analizados cerca de 40 jabalíes
El conseller de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Òscar Ordeig de la Generalitat de Catalunya, ha indicado en una entrevista en RAC1, que, hasta la fecha, el Centro de Investigación en Sanidad Animal (CReSA) ha analizado a cerca de 40 jabalíes procedentes del radio perimetrado, en el entorno de Cerdanyola del Vallès (Barcelona), junto al parque de Collserola, de los que dos han dado positivo y ocho son sospechosos de serlo.

El conseller ha afirmado que «se movilizarán los efectivos que haga falta donde haga falta», puesto que el control cinegético conlleva «un trabajo muy laborioso», sobre todo en la gestión de los cadáveres de los jabalíes.
«Quien tenga recursos, la capacidad (de hacer) este trabajo, evidentemente los movilizaremos. Sea el Seprona, la UME, los Agentes Rurales o las ADF», ha aseverado.
«Seguramente saldrán más positivos»
En una entrevista en Catalunya Ràdio también este lunes, Ordeig ha previsto que, tras los dos jabalíes contagiados ya confirmados y los ocho que están en estudio, «seguramente saldrán más positivos».
Sin embargo, ha subrayado que «el trabajo va bien» porque tanto los positivos como los sospechosos están «muy focalizados» en la misma zona donde se detectaron los primeros casos confirmados, en Cerdanyola del Vallès.
Ordeig ha detallado que la «opción más probable» para explicar el origen del brote de PPA, el primero en el Estado español desde 1994, es que «un embutido, un bocadillo contaminado pudiese llegar a la basura» y que un jabalí se lo comiese, una hipótesis que se confirmará o desmentirá «en los próximos días».
«El hecho de no haber detectado jabalíes (contagiados) en otras zonas de Cataluña o de Francia hace pensar que (el virus) ha hecho este salto vía el transporte humano», ha detallado.
Pide «colaboración ciudadana»
En RAC1, el conseller ha pedido «colaboración ciudadana» para no dar comida a los jabalíes, cerrar bien las bolsas de basura o «alertar si se ve cualquier jabalí», entre otras medidas.
De hecho, se ha referido a las personas que este fin de semana se han saltado las restricciones de acceso a Collserola, a las que ha avisado de que «cambiar la ruta para hacer actividad física un día» puede evitar un impacto mayor al conjunto de la economía catalana.
«De aquí al viernes nos jugamos el 90 por ciento del éxito de todo lo que estamos haciendo», ha advertido el conseller, y se ha comprometido en «hacer lo que haga falta» para «blindar» el radio del foco.
Si el brote se descontrola, «será terrible»
Finalmente, Ordeig ha augurado que si el brote de PPA se descontrola, «será terrible», tanto para las exportaciones como para las granjas.
Por ello, ha reclamado «subir el tono de la gravedad de la situación» para que se entienda que «si estos días podemos contener el foco, la negociación con los gobiernos de todo el mundo será mucho más rápida».
Asimismo, ha asegurado que el «lugar del mundo mejor preparado» y con un sector porcino y agroalimentario «más profesionalizado y moderno para afrontar una PPA» es Cataluña.