Teodoro González, y Tahany Al-Alim (i), de la Congregación Religiosa Fe y Esperanza y la Unión Esperanza Gitana por la Humanidad que junto a la Plataforma Nacional de Derechos Humanos, han hecho entrega hoy martes a la subdelegada del Gobierno en Granada, Inmaculada López, un manifiesto con motivo de los sucesos ocurridos en Íllora. EFE/Miguel Ángel Molina

La familia del agresor de Íllora (Granada) y colectivos gitanos denuncian racismo

Granada (EFE).- La Plataforma Nacional Derechos Humanos, la Congregación Religiosa Fe y Esperanza y la Unión Esperanza Gitana por la Humanidad, junto a familiares del presunto homicida del joven de 19 años fallecido en Íllora (Granada), han presentado un escrito ante la Subdelegación del Gobierno para denunciar “actos racistas y xenófobos” por los asaltos contra algunas viviendas y vehículos.

En una concentración convocada por estos colectivos, en la que ha participado un grupo de familiares del supuesto agresor, de 23 años y que se encuentran en prisión provisional, Teodoro González, padre de la Congregación Fe y Esperanza, ha leído un manifiesto.

En el documento se pide que paren las “brutalidades cargadas de odio” y cualquier “acto racista”.”Es momento de demostrar que estamos a favor de la convivencia pacífica entre culturas y, lo más importante, que la mayoría de los españoles estamos en contra de cualquier tipo de injusticia y, sobre todo, de todo aquello que atente contra las personas, sin que puedan prevalecer diferencias por cualquier circunstancia por ser de diferentes culturas, razas o religiones”, ha indicado.

El manifiesto, que ha sido entregado por González a la subdelegada del Gobierno en Granada, Inmaculada López, recoge además que “nadie tiene el derecho de tomarse la justicia por su mano”.

En declaraciones a los periodistas, el padre de la Congregación ha denunciado asimismo que, tras la agresión mortal y los asaltos a viviendas y vehículos de familiares del presunto agresor, estén ahora “pagando justos por pecadores”.

“Solo les han dejado coger unas cosas y les han tapiado las puertas de sus casas para que no puedan ir, esto es incomprensible en un país democrático”, ha explicado González, quien ha agradecido al padre del presunto homicida que, cuando conoció sobre los hechos -que ha atribuido a una “riña entre jóvenes” no premeditada-, entregara en la Guardia Civil a su propio hijo.

“Son muchas personas y están durmiendo en coches y encima, cuando hace unos días se fueron a un pueblo de al lado, se corrió la voz y querían lincharlos. Tienen niños, son mujeres y hombres, personas que no tienen que dormir en la calle si tienen sus casas”, ha explicado González.

La subdelegada del Gobierno, tras indicar que trasladará el manifiesto a instancias superiores, ha lanzado un mensaje de “tranquilidad” a la población en unos momentos que “siguen siendo sensibles”.

“Poco a poco tenemos que conducir a la calma y a la estabilidad”, ha declarado Inmaculada López, que ha asegurado que se está actuando siguiendo todos los cauces y protocolos oficiales, manteniendo además la presencia constante de vigilancia para evitar incidentes, que no se han repetido.

Por otra parte, en declaraciones a EFE el alcalde de Íllora, Antonio Salazar, ha negado que se hayan tapiado viviendas de familiares del joven detenido y ha explicado que, tras los asaltos a cinco inmuebles, se dispusieron tablones y recolocaron algunas puertas para evitar que se pudiera entrar nuevamente.

Según el regidor, las familias cuentan además con las llaves de esas viviendas, algunas de las cuales -ha apostillado- fueron ocupadas en su momento.