Madrid (EFE).- “Nunca dejarías tu casa abierta y desprotegida. No lo hagas en internet”. Con este mensaje el Ministerio del Interior apela a la ciudadanía a protegerse y concienciarse sobre la ciberdelincuencia. Solo el pasado año se registraron 375.506 ciberdelitos, lo que supone que una de cada cinco infracciones se cometen ya en la red.
Un alza en los delitos cometidos en el entorno virtual que se ha “acelerado notablemente” a raíz de la pandemia, pues han aumentado un 72 por ciento con respecto a 2019, ejercicio de referencia estadística en materia de criminalidad, y hasta un 352 por ciento si vemos los ciberdelitos cometidos en 2015.
El 90 % de los ciberdelitos son estafas y fraudes “online”
Nueve de cada diez de estos delitos son estafas y fraudes “online” y representan un 442 por ciento más que lo que perpetrados hace siete años, mientas la delincuencia “convencional” va en retroceso.
Esta radiografía aún sin detallar y sin concluir del fenómeno de la cibercriminalidad ha servido al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para defender la necesidad de “alertar y sensibilizar a la ciudadanía”, toda vez que las consecuencias de esta delincuencia “no genera todavía el necesario impacto social”.
Por ello, desde este jueves Interior lanza una campaña en medios de comunicación para concienciar sobre la falta de protección que el usuario tecnológico tiene en su vida virtual pero que no tendría en la real.
Así, algunos de estos anuncios reflejan situaciones exageradas en las que una mujer se deja la puerta de su casa abierta, un anciano unos billetes encima de una mesa o un joven unas fotos que se ha hecho desnudo. El objetivo es apelar al sentido común del ciudadano para que esos comportamiento irresponsables no se trasladen al mundo virtual.
En una segunda fase, la campaña saltará a las redes sociales, donde los expertos tanto del Ministerio del Interior como de la Policía Nacional y la Guardia Civil alertarán sobre los distintos ciberdelitos que se detectan o se producen con mayor frecuencia y explicarán las pautas básicas para protegernos de ellos.
Interior pide que las víctimas denuncien
En este sentido, Marlaska ha animado a los ciudadanos que sean víctima de cualquier ciberdelito a denunciar. “Pedimos a los ciudadanos que nos ayuden a protegerles, porque será muy difícil hacerlo si ellos no se conciencian primero de que deben autoprotegerse frente a la cibercriminalidad”, ha añadido el ministro.
Junto a la campaña de sensibilización, Interior reforzará las capacidades de la Oficina de Coordinación de Ciberseguridad (OCC), órgano que enlaza a la Secretaría de Estado de Seguridad con los centros de respuesta a incidentes cibernéticos nacionales de referencia.
Esta oficina, cuya plantilla aumentará, va a constituirse en el Centro de Respuesta a Incidentes Cibernéticos del Ministerio del Interior de apoyo a la Policía Judicial (CSIRT-MIR-Policía Judicial).
Tras esta modificación, dará apoyo técnico a las unidades tecnológicas de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y se constituirá en Observatorio de la Cibercriminalidad, con la misión de monitorizar, detectar, procesar y analizar tendencias delictivas en la red.
A juicio del ministro, la inteligencia policial es “imprescindible para hacer frente a los nuevos retos y amenazas en el ámbito digital”.
Además, y por primera vez, la Secretaría de Estado de Seguridad contará con una dotación presupuestaria específica de cinco millones de euros para atender las inversiones necesarias para dotar de las capacidades tecnológicas adecuadas tanto a la Oficina como a las unidades de Policía Nacional y Guardia Civil especializadas.
Marlaska ha recordado el aumento de estas plantillas: Si en 2018 estas unidades contaban en conjunto con 714 agentes, al término de 2022 esta cifra creció hasta los 1.352 efectivos.
Por última, el ministro ha avanzado que las próximas estadísticas de criminalidad que cada trimestre hace publica su departamento incluirán un desglose de ciberdelincuencia.
