Madrid (EFE).- El Gobierno ha recordado hoy que cuenta con un presupuesto de 6.500 millones de euros para inversiones hidráulicas, el mismo día que se confirma que los embalses españoles, ante la escasez de precipitaciones, acumulan menos de la mitad del agua que son capaces de almacenar por culpa de la sequía.
El presupuesto, que “se está ejecutando” y “en muchos casos son transferencias también a las comunidades autónomas”, está destinado no solo a paliar la sequía, sino a las políticas de aguas en general, y es gestionado por dos ministerios -el de Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) y el de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA)-, ha señalado la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este miércoles.
Según Rodríguez, “nunca antes en España” se había invertido tanto en este tipo de infraestructuras para “dar respuesta a las necesidades, especialmente, del sector primario” con el uso, a falta de lluvias, de agua desalada, reutilizada y depurada.
La reserva hídrica vuelva a bajar
Entre tanto, la reserva hídrica ha vuelto a bajar y se sitúa en un 49,6 % -poco más de 27.800 hectómetros cúbicos (hm³)- tras perder un 0,4 % -251 hm³- en los últimos siete días, según datos aportados por Miteco.
La cifra es inferior respecto a la misma semana del año pasado -cuando alcanzó el 50,6 %- y aún más baja respecto a la media del último decenio -el 68,4 %-, con las cuencas del Guadalquivir, las internas de Cataluña y la de Guadalete-Barbate como las más afectadas -con porcentajes entre 24,5 y 29,1 %-, mientras que las de Galicia Costa, Cantábrico Oriental y Cantábrico Occidental son las que se encuentran en mejores condiciones -con porcentajes entre el 80,4 y el 85,4 %-.
Con este panorama, el presidente nacional de Asaja, Pedro Barato, ha adelantado que la junta directiva nacional de la principal organización agraria española se plantea organizar movilizaciones para exigir medidas concretas contra la sequía porque -ha dicho- “con las cosas de comer no se puede jugar”.
Una de estas medidas podría ser el aprovechamiento del agua que va de las ciudades al mar: Barato ha puesto como ejemplo a Málaga, pues “con lo que vierte al mar tendríamos 31.000 hectáreas de regadío de olivar” pero, a su juicio, “es más fácil hablar de caudales ecológicos”.
Barato ha cargado contra el vicepresidente de la Comisión Europea para el Pacto Verde, Frans Timmermans, y contra la vicepresidenta tercera y responsable del Miteco, Teresa Ribera, a los que ha calificado como “un mal enemigo en Bruselas y una mala enemiga en España”.
Campañas de sensibilización por la falta de agua
La preocupación por la falta de agua ha incrementado las campañas de sensibilización, como la que ha puesto en marcha el Ayuntamiento de Zaragoza -que recientemente se ha aupado al puesto de cuarta ciudad más poblada de España- con el lema “Cuidemos cada gota” para animar a la ciudadanía a reducir el consumo de agua y hacer un uso más eficiente de la misma.
Este mes finaliza además el período de exposición pública del Plan Especial de Sequía de la Demarcación Hidrográfica del Ebro antes de su aprobación definitiva para actualizar esta herramienta.
El jefe de planificación de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Miguel Ángel Vera, ha recordado que la sequía “no es nada nuevo” en España, donde “la tradición dice que se produce cada cinco años”, por lo que “es algo con lo que tenemos que convivir de la mejor manera posible”, ha remarcado.
“Aislar” la sequía de la batalla electoral
El problema es tan generalizado que el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés, ha insistido a los partidos políticos para “aislar” la sequía de la batalla electoral, a menos de diez días para el inicio de campaña de los comicios del próximo 28 de mayo.
Hoy también la Agencia Catalana del Agua ha anunciado que estudiará la viabilidad de ampliar el embalse de Darnius-Boadella, en la comarca del Alto Ampurdán (Girona), para poder almacenar las precipitaciones de los temporales característicos en la zona, cortos pero muy intensos.
En Extremadura, la líder regional del PP, María Guardiola, ha acusado al presidente de esta comunidad autónoma, Guillermo Fernández Vara, de conocer la intención del Gobierno central de derruir la presa de Valdecaballeros (Badajoz) desde hace dos años y no haber hecho nada por evitarlo.
La demolición fue ordenada por una resolución del Miteco que la Junta ha recurrido formalmente porque según Guardiola “es ayer cuando -Fernández Vara- siente la presión social y política y dice que esto es un disparate” en lugar de oponerse a los primeros requerimientos que datan de marzo de 2021.
La destrucción de presas y azudes ha ido a gran velocidad en los últimos años impulsada por el ministerio que dirige Ribera que, basándose en la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos, desmanteló, según sus propios datos y solo en 2021, un total de 108 embalses, casi la mitad de los 239 destruidos en toda Europa.