Raquel de Blas |
Madrid, (EFE).- La representante en España del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Sophie Muller, alerta del deterioro gradual que ha sufrido en los últimos tres años el acceso al sistema de protección internacional en España y advierte que “la situación es muy crítica”.
Con motivo del Día Mundial de las Personas Refugiadas, que se celebra el próximo 20 de junio, Muller analiza el asilo en España, la llegada de desplazados ucranianos o el futuro Pacto Europeo de Migración y Asilo, en una entrevista con EFE marcada por el naufragio ocurrido esta semana frente a las costas del sur de Grecia en el que se cree que han muerto cientos de migrantes.
Desde Naciones Unidas exigen medidas urgentes para evitar la muerte de más personas en las aguas del Mediterráneo, donde han perdido la vida más de 1.100 en lo que va de año, recuerda Muller, que reclama vías seguras y legales para quienes se ven obligados a huir de sus países por conflictos y persecuciones.
Esta tragedia ha ocurrido en plena negociación de la nueva política migratoria europea, uno de los asuntos que España espera cerrar durante su Presidencia y en el que los Estados miembros se han comprometido a la reubicación de 30.000 migrantes cada año en función de sus capacidades, aunque a los más reacios se les da la opción de aportar 20.000 euros por cada persona que rechacen incluir en su cupo.
Pacto europeo de migración y asilo: Acnur no espera mucho más
Para Acnur, es un “avance positivo” porque se confirma que es obligatorio un mecanismo de solidaridad entre los 27, aunque las modalidades para implementarlo son “diversas”. Todos los países, excepto Hungría y Polonia, han confirmando “su deseo de trabajar juntos para un mejor espacio de protección” dentro de la UE.
“Es difícil poder esperar mucho más tal y como es el panorama europeo de diverso”, reconoce Muller, que admite además que el procedimiento de frontera tendrá una “implementación limitada” porque la cifra de 30.000 llegadas se alcanzará “de manera muy rápida”.
En 2022, la Agencia Europea de Fronteras y Costas (Frontex) contabilizó cerca de 330.000 entradas irregulares en suelo europeo, la gran mayoría cruzando el Mediterráneo, lo que supone once veces más la cifra acordada.
“Pedimos voluntad política y demostrarla a través de los hechos con herramientas concretas que permitan tomar las decisiones políticas que corresponden”, incide Muller al recordar que a raíz de la invasión rusa a Ucrania, Europa actuó con rapidez para acoger a seis millones de refugiados ucranianos.
Conflictos como los de Ucrania o Sudán y el impacto del cambio climático han hecho que en 2022 el número de personas que se han visto obligadas a dejar sus países llegue a los 110 millones de refugiados, “unas cifras sin precedentes que duelen mucho”.
Un procedimiento de asilo adaptado a Ceuta y Melilla
A punto de cumplirse el primer aniversario de la tragedia en la valla de Melilla, Muller lamenta situaciones “tan dramáticas” en las que mueren personas por buscar protección. “No debería ocurrir”, sostiene al tiempo que reclama un procedimiento de asilo adaptado a Ceuta y Melilla.
“El procedimiento de frontera, tal y como fija la ley, no permite dar una respuesta adecuada en los tiempos establecidos en la legislación debido al volumen de personas. Son sitios excepcionales que requieren una atención excepcional y un procedimiento de asilo adaptado”, asegura.
España es el tercer país europeo que más peticiones de asilo recibió el año pasado (118.842); sin embargo, también es el tercero, por detrás de Malta y Chipre, que menos solicitudes reconoció (14.235).
Situación muy crítica para acceder al procedimiento de asilo
Muller advierte de que la situación que atraviesa el sistema “es muy crítica” y de las dificultades que se que se encuentran las personas que solicitan protección internacional en España. “El principal obstáculo es no poder pedir el asilo”, asevera.
Para solicitarlo, en España existe desde la pandemia un sistema de cita previa online, donde desde hace meses no existe la posibilidad de obtener nunca cita. Para conseguirla, muchas personas se conectan horas y horas durante días, semanas y hasta meses, sin lograrlo.
“Hemos tenido un invierno muy duro porque la plataforma digital ha funcionado muy mal y ha sido objeto de mucho intento de fraude. Eso ha sido una circunstancia puntual, pero en los últimos tres años hemos visto un deterioro gradual, una situación cada vez más crítica del acceso al procedimiento”, indica.
Tras la pandemia, según explica, las solicitudes de asilo han vuelto a registrar cifras muy altas y “el número de citas no es el adecuado para las necesidades que van en aumento”. Para ello, aboga por fomentar un sistema en el que se tomen decisiones “de manera muy rápida” ya que el acceso al procedimiento “genera muchos derechos” para los migrantes.
Es consciente, no obstante, de que para agilizar la situación hay que incrementar los recursos “a todos los niveles” y “no es sencillo”. Confía en que el modelo de “techo único” puesto en marcha con los Centros de Recepción, Atención y Derivación (Creade) para acoger a refugiados ucranianos, que ya atiende a otras nacionalidades, aligere el sistema.
Primer Foro España con los refugiados
Muller valora la solidaridad demostrada por la sociedad española y con el objetivo de visibilizar iniciativas desarrolladas desde distintos ámbitos para la inclusión de las personas refugiadas, Acnur y el Ministerio de Asuntos Exteriores celebran este martes el primer Foro España con los Refugiados.
“Queremos organizar esta solidaridad tan potente para que en el Foro Mundial que se celebra a finales de año, España pueda compartir un compromiso más fuerte”, remarca Muller antes de subrayar la importancia en este proceso del equipo de refugiados asesores.
“Es el activo más valioso que tenemos porque han vivido en primera el exilio y además apoyan a muchos otros”, concluye.
