Madrid (EFE).- Una amalgama de grupúsculos de la extrema derecha de Madrid y, sobre todo ultras del Real Madrid y del Atlético de Madrid, son los que desde hace dos noches protagonizan los disturbios durante las protestas ante la sede del PSOE en Ferraz sin organización previa y con una única motivación: la violencia.
“No les mueve la ideología ni una causa en concreto sino salir a la calle a montar lío”, asegura a EFE una fuente policial que detalla que estos radicales de ultraderecha se animan por redes sociales y por foros de WhatsApp para provocar destrozos y enfrentarse con la Policía.
Fuentes policiales consultadas enumeran a EFE algunos de estos grupos y partidos de extrema derecha y falangistas que participaron en las protestas de este lunes y, sobre todo, en las de esta pasada noche: La Falange (FE), Democracia Nacional, España 2.000, Hacer Nación (una escisión de la anterior) o exmiembros de Bastión Frontal surgido en pandemia y que anunció hace un año su disolución.
Isabel Peralta, en los disturbios en la sede del PSOE
Precisamente, encaramada a un kiosco pudo verse anoche a Isabel Peralta, una ultraderechista denunciada en 2021 por un discurso contra los judíos durante un homenaje a la División Azul en Madrid y detenida en marzo de 2022 en el aeropuerto de Fráncfort cuando quería entrar a Alemania con una bandera nazi y una edición de “Mi lucha” de Adolf Hitler.
Pero además de estos grupos, cuyos miembros “van y vienen”, las fuentes policiales tienen claro que los disturbios violentos están muy ligados a los ultras más radicales del Atlético de Madrid, el Frente Atlético, y del Real Madrid, los Ultra Sur.
“Tienen gusto por el lío y la violencia sin más”, insiste un agente que coincide con otras fuentes consultadas en que el incremento de la violencia ha sido notable desde el inicio el pasado viernes de las protestas ante la sede socialista por una potencial ley de amnistía.
El pasado lunes los incidentes comenzaron a ser violentos pero no fue hasta la noche del martes, con mayor presencia de radicales, cuando las algaradas fueron más violentas con destrozo de mobiliario urbano y un mayor número de bengalas y de objetos lanzados a los agentes.
De hecho, el saldo de detenidos por el momento es de nueve personas, seis de ellas este martes, cinco hombres y una mujer de entre 17 y 44 años.
