Pekín (EFE).- El ministro de Comercio de China, Wang Wentao, urgió a que se produzcan “pasos concretos” para resolver el conflicto en torno a la empresa tecnológica Nexperia durante su reunión en Pekín con el titular español de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, en el marco del viaje de Estado de los reyes a China, informó este viernes el oficialista Global Times.
Wang acusó al Gobierno neerlandés de una “interferencia administrativa indebida” en el caso de Nexperia -propiedad china-, que calificó de violación del “espíritu de contrato” y origen de la “inestabilidad” actual en la cadena global de semiconductores.
Según el Ministerio de Comercio, de acuerdo a un comunicado publicado este jueves por la noche, China seguirá dialogando con Países Bajos “de manera racional y responsable”, pero espera que La Haya “revoque cuanto antes” sus decisiones y “corrija sus prácticas erróneas”.

Cuerpo subrayó en la reunión, celebrada este martes, que España “da gran importancia” a la relación económica con China y aseguró que Madrid está dispuesto a comunicarse con Países Bajos sobre este caso, puesto que la estabilidad de la cadena de suministro de chips “beneficia a todas las partes”.
¿Una oportunidad para la inversión española?
El ministro destacó asimismo que existe margen para ampliar la presencia empresarial española en el país asiático, especialmente en sectores como la alimentación y la automoción.
Según el comunicado chino, las compañías españolas, “en particular las del sector porcino”, siguen siendo optimistas sobre las perspectivas del mercado chino y acogen positivamente las medidas de apertura anunciadas por Pekín.
Wang situó el encuentro en el contexto del “buen momento” de los intercambios bilaterales y recordó que el reciente pleno del Partido Comunista ha definido un nuevo plan de apertura económica para los próximos cinco años.
China, dijo, “da la bienvenida” a que empresas europeas, incluidas las españolas, amplíen su cooperación y aprovechen las oportunidades de su “amplio mercado”.
La reunión tuvo lugar coincidiendo con la visita de Estado de Felipe VI, la primera de un monarca español a China en 18 años y que culmina una intensa agenda bilateral en 2025.