Concentración de trabajadores del centro penitenciario de Logroño. EFE/Raquel Manzanares

Funcionarios de la cárcel de Logroño exigen que se cubran las 35 plazas vacantes

Logroño, (EFE).- Trabajadores del centro penitenciario de Logroño han exigido este viernes que se cubran los 35 puestos vacantes para cumplir la relación de puestos de trabajo para evitar nuevas agresiones a los funcionarios, como la causada este miércoles por un preso que había realizado un butrón para fugarse.

Con una pancarta con el lema “prisiones sin agresiones”, los trabajadores de la cárcel han secundado la concentración convocada por los sindicatos CCOO, CSIF, la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (ACAIP-UGT) y la Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP).

El portavoz de ACAIP-UGT en La Rioja, Jorge Cabezas, ha dicho a EFE que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y el Ministerio del Interior tienen que “tomar medidas” para evitar que se produzcan otras agresiones a los trabajadores.

Ha agregado que, aparte de las falta de personal, han denunciado en otras ocasiones las “deficiencias estructurales de la cárcel de Logroño, que es un centro viejo con 38 años de antigüedad”.

Cabezas ha insistido en que el centro penitenciario de la capital riojana, que tiene categoría C, no permite internar a presos con las “características” de los reclusos que han llegado últimamente, que son “el 95 por ciento de los que crean los incidentes”.

Según sus datos, son presos que llegan “progresados del primer o segundo grado, pero en vez de derivarlos a una prisión de características especiales con regímenes de aislamiento en condiciones, les mandan a Logroño, que debería tener internos de perfil bajo y condenas cortas”.

Quejas desde hace años

Ha recalcado que los funcionarios de la prisión llevan dos años y medio alertando sobre esta situación a todas las administraciones e instituciones competentes, desde el Ministerio del Interior, a la Delegación del Gobierno y al Defensor del Pueblo, pero “nadie hace caso y las quejas caen en saco roto”.

Según los datos facilitados por la Delegación del Gobierno en La Rioja, actualmente la población reclusa de esta cárcel es de 287 internos en el centro y 65 fuera -en libertad condicional o con control telemático-, para una capacidad total de 500 internos.

Para el portavoz de ACAIP-UGT en La Rioja, la capacidad total de 500 presos solo se cumpliría si todas las celdas estuvieran ocupadas por dos presos, si la sección abierta estuviese cubierta a tope, al igual que la enfermería estuviese, el módulo de aislamiento y el de fuerzas de seguridad, algo que es “improbable”.

En la concentración ha participado el funcionario que fue agredido por uno de los tres presos de la cárcel de Logroño que realizaron butrones en el baño de sus celdas para fugarse por el tejado, quien fue operado este jueves ante la posibilidad de que perder la movilidad en el dedo de una mano por estas lesiones.