Logroño, (EFE).- Los viticultores riojanos exigen precios para sus uvas que no estén por debajo de los costes de producción, por lo tanto, el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria a este respecto, han informado este lunes las organizaciones agrarias ARAG-Asaja, UAGR y UPA.
ARAG-Asaja , en una nota, ha pedido que “las transacciones de compra-venta de uva que se den esta próxima vendimia cumplan la normativa vigente de la Ley de la Cadena Alimentaria”.
Ha pedido que se realicen mediante contratos, que reflejen el precio por encima de los costes de producción, y detallen el plazo de pago, de forma que se pueda demostrar que se garantiza el precio mínimo de referencia para las operaciones que están encima de la mesa.
En la misma línea, la UAGR, en un comunicado, ha pedido que se “vele por el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria, se registren los contratos, como es obligatorio, y siempre por encima de los costes de producción”.
Los viticultores de la Denominación de Origen Calificada (DOCa-Rioja) “reducen sus producciones campaña tras campaña, pero su esfuerzo no siempre se ve recompensado con unos precios que superen los costes de producción”, ha precisado.
Esta organización ha añadido que “hay bodegas que incumplen flagrantemente la Ley de la Cadena Alimentaria al pagar en el entorno o por debajo de los 70 céntimos por kilo de uva, coste medio de producción de la campaña 2021”.
En la misma línea, la UPA de La Rioja, en una nota, ha exigido también el cumplimiento de la citada normativa en todas las operaciones de Rioja, tras conocer que “alguna bodega ha comunicado a sus viticultores la compra de uva a 40 céntimos para la campaña de 2023, 30 céntimos por debajo de los costes de producción”.
UPA ha recordado que esta normativa regula que el precio de la uva debe ser superior a los costes de producción y ha instado a la Consejería de Agricultura, como responsable de velar por el cumplimiento de la Ley de la Cadena, a asegurar que todas las bodegas paguen por encima de los costes.
Las tres organizaciones han recordado al Gobierno riojano que los 15 millones de euros anunciados como ayudas directas anticrisis al sector vivitinícola no son suficientes para solucionar el actual problema y espera que no se traduzcan en un reparto de dinero entre bodegas.