Una de las fachadas interiores del patio del céntrico colegio Adoratrices de Logroño que se derrumbó ayer. EFE/Raquel Manzanares

Comienza la demolición del edificio bajo cuyos escombros murió un trabajador en Logroño

Logroño, (EFE).- La empresa encargada de las obras en el edificio anexo al colegio Adoratrices de Logroño, que se derrumbó este martes y bajos cuyos escombros falleció un trabajador, comienza este miércoles la demolición controlada del inmueble por el procedimiento de urgencia.

La previsión es que la demolición de este edificio, formado por tres plantas más un sótano, se prolongue hasta última hora de este jueves, por lo que se mantienen las medidas cautelares de desalojo de dos inmuebles y un local comercial que se encuentran en las inmediaciones.

El derrumbamiento de este edificio, que la congregación del colegio de las Adoratrices había vendido hace unos meses a una promotora para la construcción de una residencia, provocó el fallecimiento de un trabajador, mientras que otros dos fueron rescatados con vida y trasladados al Hospital San Pedro de Logroño, donde permanecen ingresados y evolucionan bien de sus heridas.

El derrumbe se produjo en vertical, por cascada desde la última planta hacia abajo, y los escombros cayeron sobre el patio interior del colegio, sin que aún se conozcan las causas que produjeron este suceso, que investiga la Policía Nacional y la autoridad laboral.

Las obras en este edificio anexo, que data del siglo XX, contaba con las licencias y permisos de obras municipales necesarios, según detalló el Ayuntamiento, cuyos técnicos han aconsejado la demolición del inmueble afectado porque la estructura está muy dañada.

La portavoz del Gobierno municipal de Logroño, Celia Sanz, ha explicado este miércoles, en una rueda informativa, que la demolición de la zona afectada comenzará con la retirada de toda esa infraestructura, de forma que sea menos dañina para el resto del edificio.

UNA INVESTIGACIÓN RIGUROSA

“Dejaremos que siga la investigación por parte de la Policía Nacional para que se depuren las causas del derribo”, ha añadido Sanz, quien ha resaltado la “excelente” labor de coordinación y rapidez de todos los profesionales que participaron ayer en el operativo de emergencia, que llegó a movilizar a entre 70 y 80 personas en unos 10 o 12 minutos.

Por su parte, UGT y CCOO de La Rioja han convocado este miércoles sendas concentraciones y han guardado un minuto de silencio en recuerdo del trabajador fallecido y los dos heridos; al mismo tiempo que han exigido una investigación sobre lo sucedido.

CCOO ha demandado una “rigurosa” investigación de lo ocurrido, que “quienes tengan que asumir las responsabilidades las asuman”; y, dada la situación de “vulnerabilidad” de los trabajadores afectados -empleados por una empresa subcontratada-, ha exigido “la actuación inmediata y urgente de la Fiscalía”.

El secretario general de UGT-FICA La Rioja, Juan Carlos Alfaro, ha señalado que este accidente laboral es el décimo con víctima mortal en la región en lo que va de año y ha dicho “alto y claro” que, “cuando ha pasado algo, es porque ha faltado la seguridad en la obra”.