Sergio Jiménez Foronda |
Logroño (EFE).- El cartel que promociona la Semana Santa de Logroño 2024 rompe con la tradición de tener una fotografía de un paso y, por el contrario, es “como un cuadro cubista”, protagonizado por triángulos de colores que representan los capirotes de los cofrades, ha explicado a EFE su autor, Marcos Sánchez.
Sánchez (Valladolid, 1973) ha añadido que desde pequeño ha visto cómo los carteles de Semana Santa, no solo de la capital riojana, sino en general, consistían en fotografías “muy buenas, pero todas de imágenes” de cristos y vírgenes.
Este diseñador gráfico ha indicado que, cuando decidió presentarse a la elección del cartel de este año, quiso “salir de lo políticamente correcto, aunque la gente se me eche encima, porque en estas cosas, si te sales de lo normal, te dicen que por qué has hecho eso, pero tampoco ofendo a nadie”.
“Me dije ‘voy a hacer lo que yo quiero hacer’ y parece que ha gustado porque es un cartel un poco más arriesgado y moderno, que recuerda a un cuadro cubista”, ha añadido Sánchez, quien ha jugado con las simetrías de unos triángulos en los que se pueden apreciar los colores de las 11 cofradías de Logroño.
A su vez, ha proseguido, “estos colores resaltan más por tener un fondo oscuro que mantiene ese misterio de la Semana Santa que siempre quería reflejar, también para que no pareciera un cartel de carnaval”; e integró letras triangulares y picudas para que todo fuera como un cuadro cubista.
Hacer algo distinto, no provocar
Ha destacado que la idea elegida por unanimidad para representar la Semana Santa logroñesa era “romper con las típicas imágenes y hacer algo distinto, que no es que otros carteles hayan tenido fotografías malas ni que fueran malos, sino que me planteé ‘¿por qué no se puede hacer un cartel así?’”.
“Es una forma de atraer a nuevos públicos y también de que se hable porque me decían ‘ya sabes que igual hay algunos puristas que van a ponerte a parir’, y, bueno, si es así, siempre está bien que hablen de ti, aunque sea mal”, ha subrayado.
Sánchez ha señalado que, aunque tenía “un poco de miedo” a que se revelase este cartel por la polémica que suscitó el de la Semana Santa de Sevilla, su trabajo “no ha sido para provocar, sino que me apetecía (plasmar esta idea) y cuando lo presenté no pensé que fuera a salir elegido porque, igual, buscaban imágenes”.
Unanimidad del jurado
“Me han dicho que ha gustado por unanimidad (al jurado), eso es porque algo tendrá y creo que puede ser la diferencia con los demás que se hayan presentado, aunque no he visto ninguno”, ha incidido.
Ha apuntado que no diseñó este cartel pensando “voy a hacer un cartel cubista”, sino que “fue saliéndome a medida que lo fui dibujando y me pareció bien y que podía funcionar a nivel visual”.
Sánchez trabaja como diseñador gráfico desde hace 23 años en la empresa riojana Sidecar Design, que prepara campañas, cartelería, logotipos e identidades corporativas, una labor a la que se suma la de ilustrador por cuenta propia con su marca ‘don Mal de amores’.
