El director territorial de Ibercaja en La Rioja, José Ángel Pérez (iz), y el alcalde de Logroño, Conrado Escobar (d) en lo alto del campanario del torreón. EFE/Raquel Manzanares

El Ayuntamiento logroñés organizará visitas al torreón de Ibercaja dentro de una red de miradores

Logroño (EFE).- El Ayuntamiento de Logroño ha recibido de Ibercaja Banco el torreón que alberga el histórico reloj, campanario y sirena en el edificio situado en el número 1 de Muro de la Mata, cuya maquinaria de 1948 se va a recuperar para exhibirla después en visitas turísticas dentro de una red de miradores de la ciudad.

El director territorial de Ibercaja en La Rioja, José Ángel Pérez, ha entregado este miércoles las llaves del torreón al alcalde de Logroño, Conrado Escobar, en un acto al que han asistido otros representantes de la entidad bancaria y el relojero José Luis Tomás, quien se encargará de la restauración y mantenimiento del reloj.

El director territorial de Ibercaja en La Rioja, José Ángel Pérez (iz), entrega este miércoles las llaves del torreón al alcalde de Logroño, Conrado Escobar (d). EFE/ Raquel Manzanares

En declaraciones a los periodistas, Pérez ha indicado que la donación del icónico torreón a la ciudad es “un gesto que simboliza el compromiso y la conexión profunda de Ibercaja con los logroñeses” y, además, supone una manifestación de la “cercanía” de la entidad bancaria con el territorio, donde va a cumplir 90 años de presencia en 2026.

Memoria sonora de la ciudad

Escobar ha resaltado que con esta donación, rubricada ante notario en escritura pública, se incorpora el torreón y todos sus elementos al “patrimonio oficial” de los logroñeses.

El alcalde logroñés ha recordado que Ibercaja, cuya denominación original fue ‘Caja de ahorros y monte de piedad de Zaragoza, Aragón y Rioja’, forma parte del urbanismo logroñés y del corazón de toda la ciudad, ya que este reloj y su sirena han marcado “la memoria sonora” del paisaje urbano de muchas generaciones.

Visita al campanario situado sobre la maquinaria del reloj, en el torreón donado. EFE/ Raquel Manzanares

La visita al torreón se incluirá en una red de miradores, en un principio urbanos -como las torres de la concatedral de La Redonda y San Bartolomé- y, más adelante, con otros del entorno natural, como el Monte Cantabria y la torre isabelina del barrio de El Cortijo, “como un circuito emocional y turístico” de la ciudad.

Restauración profunda del reloj

El relojero ha explicado que la maquinaria original data de 1948, cuando se instaló, pero presenta “suciedad” y algunos “achaques”, de modo que habrá que hacer “una restauración profunda de todos sus componentes” para evitar problemas.

Tomás ha incidido en que se podría hacer una visita con ciudadanos antes de realizar estas tareas y, después, otra para que comprueben cómo se ha puesto a punto el reloj tras ese “reset”.