Logroño (EFE).- Sergio Toribio, el activista riojano que viajaba en el barco Handala para llevar alimentos a Gaza y que permanece bajo custodia de las autoridades de Israel, «está fuerte, sano y sonriendo cuando lo ha visitado la abogada», ha explicado a EFE su hermana, Raquel Toribio.
Raquel Toribio ha hablado con la abogada de su hermano después de que ésta lo visitase en la cárcel de Givon, a donde fue trasladado tras haber sido interceptado el pasado 26 de julio el barco en el que viajaba junto a otros veinte activistas para entregar alimentos a la población de la Franja de Gaza.
«La abogada me ha dicho que Sergio está bien, fuerte y sano, su ánimo también es genial y estaba sonriendo y riendo mucho cuando lo han visitado», ha precisado.
Ha indicado que está en una habitación junto a otros cinco activistas y aún no tienen datos de cuándo Sergio Toribio podrá regresar a España.
La familia de esta activista riojano está «mejor de ánimo que al principio de conocer la noticia, con ganas de que vuelva a casa, pero con miedo de que se embarque otra vez», ha añadido su hermana.
Sergio Toribio, un mecánico de barcos de 49 años, ya fue interceptado el pasado mes de junio cuando viajaba en el buque Madleen para prestar ayuda humanitaria en Gaza.
En esa ocasión, firmó los papeles de deportación y regresó a España al día siguiente, pero ahora no los ha firmado y permanece bajo custodia de las autoridades de Israel.
El barco Handala, de la Flotilla de la Libertad, viajaba con 21 activistas, entre ellos el también español Santiago González; salió del puerto italiano de Siracusa el pasado 13 de julio y fue interceptado 13 días después.
