Eduardo Palacios / Logroño, (EFE).- Roblox es una plataforma de juegos en línea que tiene millones de usuarios jóvenes por todo el mundo, atraídos por su carácter gratuito y por las comunidades de jugadores que fomenta, pero esconde peligros, algunos de índoles sexual, como el grooming o el ciberacoso, o incluso estafas.
Así lo ha explicado a EFE Judit Cuesta García, directora del máster en Diseño y Desarrollo de Videojuegos de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), que ha incidido en que a pesar de que la propia plataforma «ha hecho esfuerzos» por mejorar, uno de sus riesgos es que es muy complicado verificar la edad de quienes participan en sus comunidades de jugadores y sus juegos tampoco están calificados por edades.
El que los juegos de Roblox sean gratuitos es un atractivo «para los chavales y para los padres» y «dentro de los juegos puedes hacer compras y ahí está uno de sus peligros» por el acceso que tienen a poder comprar niños incluso muy pequeños.
Para los adolescentes, detalla, «el punto de atención son las comunidades de jugadores» en donde «adultos pueden hacerse pasar por adolescentes» algo que «ya se ha comprobado en diferentes estudios» que han detectado casos en los que se hacían propuestas de índole sexual (grooming), había ciberacoso o intercambio de material de contenido sexual (sexting).
«Si un adulto no supervisa los grupos de conversación de Roblox, es cuando esa plataforma se convierte en peligrosa», alerta la experta.
Admite que otras plataformas de internet tienen este tipo de peligros «pero los adultos no dan tantas facilidades a niños y adolescentes para usarlas».
Sensación de algo inofensivo
Además, «cuando algo en la red es gratuito» como esta plataforma de juegos «el producto eres tú» y «también hay que ser consciente de ello» y evitar casos como «por ejemplo el que niños pequeños abran cofres en un juego, porque supuestamente es gratuito, y luego llegan cargos muy altos a la tarjeta de crédito».
«El verdadero problema que tenemos es que los padres de los niños y adolescentes no entienden, en general, a qué juegan sus hijos» y «por eso les dejan delante de una pantalla como si no fuera a pasar nada», considera.
Por eso, su principal recomendación, en el caso de Roblox y otros juegos en línea es que los padres «jueguen con sus hijos una hora, que comprueben que lo que hacen es seguro y a partir de ahí les den más espacio».
«No se trata de demonizar a toda la plataforma, que tiene contenidos maravillosos, pero sí hay que prevenir los riesgos que nos podemos encontrar en ella», recalca esta experta.
No solo con esta plataforma, sino con la red en general, «todavía falta un poco de alfabetización digital y a los chavales se les debería explicar en los colegios los riesgos a los que se enfrentan» además de que «hay que ser conscientes de que, como sociedad, nos enfrentamos a algo muy nuevo y es difícil medir el impacto que va a tener».
Sí que es cierto, subraya Cuesta García, que existen estudios que evidencian que los adolescentes, especialmente los de más corta edad, no tienen su mente preparada para enfrentarse a plataformas creadas para que se «enganchen».
«Ese momento es cuando están desarrollando su personalidad, que están desarrollando pensamiento crítico, si les damos algo que les atonta, estamos generando que sean adultos que no piensen y que no sean capaces de solucionar sus problemas», concluye.