El presidente de Chile, Gabriel Boric (d) junto al canciller alemán, Olaf Scholz durante una declaración conjunta, hoy en el palacio de La Moneda, en Santiago de Chile (Chile). EFE/Elvis González

Chile y Alemania coinciden en crear un sitio de memoria en la Colonia Dignidad

Santiago de Chile (EFE).- El presidente de Chile, Gabriel Boric, y el canciller de Alemania, Olaf Scholz, coinciden en construir un sitio de memoria en la antigua Colonia Dignidad, el enclave creado por el suboficial nazi Paul Schaefer que operó como centro de detención durante la dictadura militar chilena (1973-1990).

“Apoyamos completamente y agrademos la voluntad del Gobierno de Alemania de contribuir a la búsqueda de la verdad y hacer de la ex Colonia Dignidad un espacio de memoria. Es rol del Estado chileno el seguir luchando de manera incansable por toda la verdad y toda la justicia”, dijo Boric en rueda de prensa conjunta con Scholz en el palacio presidencial de La Moneda.

El presidente de Chile, Gabriel Boric (d) junto al canciller alemán, Olaf Scholz durante una declaración conjunta, hoy en el palacio de La Moneda, en Santiago de Chile (Chile). EFE/Elvis González

Scholz, por su parte, indicó que su Gobierno “contribuirá” para crear un espacio de memoria en el antiguo asentamiento, ubicado a casi 400 kilómetros al sur de Santiago y uno de los episodios más controvertidos en las relaciones entre ambos países.

“Sabemos que se trata de un tema sensible, no es fácil encontrar una solución. Por eso, con toda la prudencia, queremos ofrecer nuestro apoyo y hacer lo que podamos hacer. Somos un socio en este contexto”, añadió el canciller, quien inició este domingo su primera visita oficial a Chile.

Colonia Dignidad, en el foco

En Colonia Dignidad, hoy rebautizada como Villa Baviera, Schaefer sometió a trabajos forzados, castigos, manipulación mental y, en algunos casos, abuso sexual a más de 300 personas, muchas de las cuales le siguieron a Chile desde Alemania.

El asentamiento, fundado en 1961 y que no fue desmantelado hasta 1991 por orden del presidente Patricio Aylwin (1990-1994), sirvió además de centro de torturas de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), la policía secreta del dictador Augusto Pinochet.

Se estima que más de cien opositores al régimen fueron asesinados en el recinto y que hoy en día siguen desaparecidas.

Fotografía cedida por la Presidencia de Chile, del presidente de la República, Gabriel Boric (d), junto al canciller alemán, Olaf Scholz (i), visitan hoy el emblemático Museo de la Memoria y los Derechos Humanos de Santiago (Chile). EFE/Presidencia de Chile

Organizaciones de derechos humanos y víctimas han acusado durante años tanto a la justicia chilena como a la alemana de no perseguir de manera suficiente los crímenes de cometidos y han criticado a los Gobiernos de ambos países de no llegar a un acuerdo para construir un espacio de memoria allí.

Schäfer, condenado en 2006 por abusos sexuales y fallecido en 2010, fue encerrado en una prisión chilena después de ser detenido en Argentina, hasta donde había escapado.

“La historia de Colonia Dignidad es terrible, desgarradora (…) y es terrible también, y no está de más recordarlo, el apoyo que tuvo por parte de un sector de la política chilena, algunos de los cuales están todavía en el escrutinio público”, agregó Boric.

El mandatario hacía referencia así a las presuntas relaciones que algunos políticos tuvieron con el enclave alemán, como Hernán Larraín o Víctor Pérez, quienes ocuparon los cargos de ministro de Justicia e Interior, respectivamente, durante la pasada Administración de Sebastián Piñera (2018-2022).

El encuentro de Scholz y Boric en Santiago

Scholz inició su visita a Chile recorriendo junto a Boric el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, ubicado en Santiago y dedicado a conmemorar a las víctimas de la dictadura militar, una instancia “impactó mucho”.

“No existe una dictadura sin víctimas”, subrayó el líder alemán, quien aterrizó por la tarde procedente de Argentina y mañana pondrá rumbo a Brasil como parte de su primera gira latinoamericana desde que asumió el cargo en diciembre de 2021.

Se trata del segundo encuentro que sostienen ambos mandatarios, que ya se reunieron el pasado septiembre en Nueva York en el marco de la 77° Asamblea General de la ONU.

El presidente de Chile, Gabriel Boric (d) junto al canciller alemán, Olaf Scholz durante una declaración conjunta, hoy en el palacio de La Moneda, en Santiago de Chile (Chile). EFE/Elvis González

Chile y Latinoamérica no han sido una prioridad de la política exterior alemana de los últimos años, pero Scholz -en el cargo desde diciembre de 2021- busca profundizar los lazos políticos y económicos con la región en momentos en que Alemania está sufriendo el impacto de la guerra en Ucrania.

Desde la caída del muro de Berlín, solo ha habido tres visitas de cancilleres alemanes a Chile: Helmut Kohl (1991), Angela Merkel (2013) y ahora el socialdemócrata Scholz, que gobierna junto a verdes y liberales.

Scholz: “No hay país que apoye más a Ucrania que Alemania”

El canciller alemán, Olaf Scholz, aseguró que “no hay país que apoye más a Ucrania que Alemania” y que la guerra “no debería ser una competencia sobre quién envía más ayuda”.

“Alemania es parte de los países europeos que más armamento envía y, con las decisiones más recientes, vamos a estar en primera línea”, dijo Scholz, después de que esta semana su Ejecutivo autorizase el envío de tanques de tipo Leopard 2 a Ucrania.

Preguntado sobre si descarta la posibilidad de enviar aviones de caza si el conflicto se agrava, el canciller aseguró que junto al presidente estadounidense, Joe Biden, excluyeron “ciertos aspectos al inicio de la guerra porque esto hubiera llevado a una mayor escalada”.

“También rechazamos enviar tropas a Ucrania”, añadió Scholz, quien está realizando su primera gira latinoamericana y compareció en una rueda de prensa junto al presidente chileno, Gabriel Boric, desde el palacio presidencial La Moneda, en Santiago.

Scholz, quien aterrizó este domingo en Chile procedente de Argentina y el lunes viajará a Brasil, pidió “tener un debate serio” sobre la guerra y zanjar “la competencia sobre quien envía más ayuda”.

“Hemos brindado apoyo de forma financiera, humanitaria y también con envío de armas. Es nuestra obligación, a la vez que hemos contribuido a que no haya una escalada del conflicto”, afirmó.

“Vamos a tratar de evitar con todos nuestros esfuerzos una guerra entre Rusia y los países de la OTAN. Lo hemos conseguido hasta ahora”, subrayó.

El canciller alemán indicó además que la guerra “no se trata de un asunto meramente europeo, sino de un desafío para todo el orden internacional” y agradeció el apoyo a Ucrania de varios países de la región, en especial de Chile.

“Las democracias del mundo debemos mantenernos unidas y evitar una vuelta a la ley del más fuerte (…) La clara posición de Chile en la condena de la agresión rusa es importante y es lo correcto”, apuntó.