Luis Miguel Pascual |
París (EFE).- Por tan solo nueve votos, el presidente francés, Emmanuel Macron, salvó este lunes la continuidad de su Ejecutivo y la reforma de las pensiones que ha provocado multitudinarias manifestaciones en el país y la parálisis de algunos sectores de la economía.
Más que nunca, el partido del presidente mostró su debilidad en la Asamblea Nacional, donde el Ejecutivo de Élisabeth Borne se enfrentó a dos mociones de censura, para totalizar 16 desde que hace un año fue nombrado, y salvó el pellejo por un estrecho margen.
La primera moción, presentada por un grupo de diputados centristas, regionalistas e independientes, aglutinó 278 de los 287 votos necesarios, mientras que la de la extrema derecha solo tuvo 94, algo más de los votos del partido de Marine Le Pen.
La segunda de las mociones de censura, esta presentada por la extrema derecha, fue rechazada de forma mayoritaria, al haber obtenido solo 94 de los 287 votos necesarios en la Asamblea Nacional.

El resultado es un alivio para el Gobierno, pero también la constatación de que su margen de maniobra pende de un hilo y que cada iniciativa se enfrenta a un camino pedregoso, al tiempo que da alas a proseguir la movilización social contra el Ejecutivo.
Desde que el partido de Macron perdió la mayoría absoluta en las legislativas de junio pasado, Borne no ha sabido tejer alianzas, lo que le ha llevado a acudir en once ocasiones a aprobar reformas sin voto parlamentario.

Hasta ahora, la primera ministra había logrado, mal que bien, sacar adelante proyectos gracias al respaldo de la derecha tradicional de Los Republicanos (LR), pero en la reforma de las pensiones este partido se fracturó.
Casi un tercio de los 61 diputados del LR apoyaron esta vez la primera moción de censura, contra la reforma de las pensiones de Macron, lo que pone al Gobierno pendiente de un partido en plena descomposición, con guerras intestinas tres meses después de haber celebrado un congreso.
La dirección de LR aseguró que se plantea la exclusión de los 19 diputados díscolos.
La oposición se crece
Tanto la izquierda como la extrema derecha casi vieron lo ajustado del resultado como una victoria, ya que aseguraron que el respaldo del Ejecutivo se degrada con el paso de los meses.
Además, anunciaron un recurso ante el Consejo Constitucional contra la reforma de las pensiones, lo que retrasará unas semanas su entrada en vigor.
Pero la izquierda fue clara al apelar a proseguir el combate contra esa reforma en las calles, donde desde principios de año los sindicatos han multiplicado las jornadas de manifestación y las huelgas.
“Nueve votos no pueden detener la democracia social. El pueblo tiene que tomar cartas en el asunto y es lo que va a hacer”, aseguró el líder izquierdista Jean-Luc Mélenchon, que apeló a seguir manifestando contra esa reforma que retrasa dos años, hasta los 64, la edad mínima de jubilación.
La lideresa de la extrema derecha, Marine Le Pen, por su parte, consideró que “el Gobierno pierde legitimidad” y apeló a Macron a convocar un referéndum sobre la reforma de las pensiones.

Le Pen consideró que la crisis política que vive el país solo puede superarse “por las urnas”, por lo que pidió una disolución de las cámaras y la convocatoria de legislativas.
Los opositores a la reforma siguieron manifestando en contra de la misma en varias ciudades del país, mientras que el sindicato más combativo, la CGT, aseguró que la aprobación de la reforma “no frena la determinación de los trabajadores”.
Poco después de las votaciones en la Asamblea, se formó una concentración en la plaza Vauban, junto al mausoleo de Napoleón, en contra de la reforma.
Varios sectores, como los transportes, la educación o la recogida de basuras de diversas ciudades, mantienen llamamientos a la huelga en los próximos días y los sindicatos han convocado una novena jornada de paros y manifestaciones para este jueves.
Durante el debate de las mociones de censura, la primera ministra defendió que la reforma fue uno de los compromisos de Macron durante la campaña y acusó a la oposición de otorgar más legitimidad a la calle que a las instituciones.
“Acaba la vía democrática de esta reforma esencial”, indicó la jefa del Gobierno tras el rechazo de las mociones.
La jefa del Gobierno aseguró que “nadie tiene el monopolio para hablar en nombre del pueblo” y pidió respeto por las instituciones democráticas.
Disturbios en las calles y casi 300 detenidos en otra noche de incidentes
Casi 300 personas han sido detenidas en la noche del lunes al martes en una nueva serie de altercados en diferentes ciudades francesas, y sobre todo en París, contra la reforma de las pensiones del presidente, Emmanuel Macron.
Según el recuento policial de sus actuaciones durante la noche, ha habido 234 arrestos en París y 53 en el resto de Francia en las protestas que se han producido tras el fracaso este lunes por los pelos de una de las dos mociones de censura contra el Gobierno de Macron, presentadas en respuesta por la adopción por decreto de la reforma de las pensiones.
En la capital, varios cientos de personas se concentraron en una plaza próxima a los Inválidos y a la Asamblea Nacional mientras se debatían las mociones de censura y, al ser desalojadas por las fuerzas del orden, se dispersaron por calles y barrios adyacentes.
Algunos grupos provocaron incidentes, por ejemplo en el barrio de la Ópera, con la quema de algunas de las montañas de residuos que se han formado por la huelga de la recogida de basuras en la mitad de los distritos de la ciudad desde hace más de dos semanas.
El Ejecutivo, que trata de controlar las diferentes formas de protesta, anunció este martes que ha decidido obligar a la vuelta al trabajo de los trabajadores en paro en uno de los grandes depósitos de carburante del puerto de Fos-sur-Mer, en el departamento de Marsella (sureste) donde decenas de gasolineras se han quedado sin combustible.

Fuentes del Ministerio de la Transición Energética indicaron que esa decisión la toma “frente al agravamiento de las tensiones de aprovisionamiento” en ese departamento. Se trata de obligar a trabajar a tres empleados por turno en ese depósito durante un periodo total de 48 horas.
Las instalaciones de Fos-sur-Mer permiten el aprovisionamiento de carburantes de toda la región Provenza Alpes Costa Azul, así como del este de la de Aquitania. Además, de ahí parte un oleoducto hacia la de Lyon.
Todas las refinerías de Francia están paradas o en proceso de suspensión de su actividad por las huelgas contra la reforma de las pensiones y eso corre el riesgo de traducirse en escasez de carburante en las gasolineras de todo el país, aunque la amenaza a más corto plazo viene del bloqueo de los depósitos.
Las huelgas continúan en diferentes sectores, como los transportes o la recogida de basuras en diferentes ciudades como París, donde siguen acumuladas en una parte de la ciudad miles de toneladas de basuras.
En el transporte, el paro de controladores aéreos ha obligado a las aerolíneas a anular un 20 % de sus programas de vuelos en el aeropuerto parisino de Orly y en el de Marsella, tanto hoy como mañana.
El jueves, todos los sindicatos han convocado la que será la novena jornada de huelgas y manifestaciones contra la reforma de las pensiones, que prevé retrasar la edad mínima de jubilación de los 62 años actualmente a 64.
Macron no tiene intención de remodelar su Gobierno ni de convocar elecciones
El presidente francés, Emmanuel Macron, no tiene intención de remodelar su Gobierno, al menos a corto plazo, ni de disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones legislativas para intentar pasar página de la crisis política y social por su reforma de las pensiones.

Este es uno de los mensajes que han filtrado a los medios varios de los participantes esta mañana en un encuentro de Macron con miembros de su Gobierno y de los partidos que le dan apoyo, un día después de que el lunes fracasara por un margen muy estrecho (apenas nueve votos) una de las mociones de censura de la oposición.
El presidente, que ha decidido comparecer en los dos principales canales de televisión el miércoles a las 13.00 locales (12.00 GMT), para anunciar sus planes tras la adopción por decreto de esa reforma en un contexto de endurecimiento de las protestas, también excluye un referéndum sobre las pensiones, según uno de los asistentes citado por France Info.
En los últimos días han circulado múltiples hipótesis sobre su estrategia y una de las que más se ha repetido era la eventual sustitución de la primera ministra, Élisabeth Borne, en un cambio de gabinete.
Pero Borne ha indicado esta mañana en otro encuentro con los diputados del partido macronista Renaissance que quiere continuar con “las transformaciones necesarias para el país”, según la versión de un participante citado por France Télévisions, y ha insistido en que hay que mantenerse unidos “frente al populismo”.
Más allá de estas proclamas para insuflar ánimos a sus tropas, el secretario general de Renaissance, Stéphane Séjourné, ha advertido en declaraciones al canal BFMTV de que si no se sacan las lecciones de lo ocurrido “pasaremos de un Gobierno con mayoría relativa a un Gobierno minoritario”.
Séjourné ha señalado que si el Ejecutivo no cuenta con una mayoría parlamentaria no podrá sacar adelante nuevos proyectos de ley y entonces “habrá que sacar conclusiones más radicales para el Gobierno”.