El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, en una imagen de archivo. EFE/EPA/Sarah Yensel

Rechazan dos recursos de Trump para retrasar su primer juicio penal

Nueva York (EFE).- Dos juezas en dos tribunales distintos de Nueva York denegaron sendas peticiones del expresidente estadounidense Donald Trump de retrasar su primer juicio penal, relacionado con los presuntos pagos a la actriz porno Stormy Daniels.

A última hora del lunes, una jueza del Tribunal de Apelaciones del Estado, Lizbeth González, rechazó una moción de aplazamiento después de que la defensa de Trump solicitara una audiencia de emergencia argumentando que el expresidente de EE.UU. no afronta un juicio justo debido a la cobertura mediática negativa.

En esa misma moción, los abogados de Trump también solicitaron un cambio de tribunal para la celebración del juicio, previsto a partir del lunes 15 de abril en Manhattan, cuestión que también fue rechazada, informaron este martes CNN y otros medios.

Posteriormente, la jueza Cynthia Kern, de la división de Apelaciones de la Corte Suprema de Nueva York, rechazó otra moción en la que los abogados pedían retrasar el juicio mientras recurren una “orden mordaza” que limita los comentarios públicos de Trump sobre algunos actores del proceso.

No obstante, se espera que un panel del Tribunal de Apelaciones valore más adelante la solicitud de modificar la “orden mordaza” impuesta a Trump por el juez Juan Merchan, que impide al precandidato republicano hacer comentarios sobre los testigos del juicio y los familiares del fiscal de Manhattan y del propio juez.

Primer juicio penal contra un expresidente

Los abogados habían alegado que Trump no podría tener un juicio justo en Nueva York. 

El expresidente republicano (2017-2021) se enfrenta a 34 cargos de fraude por falsificar documentos para ocultar unos pagos hechos en 2016, durante su campaña presidencial, a la actriz porno Stormy Daniels para comprar su silencio sobre una supuesta relación extramarital, algo que Trump niega.

El proceso de Nueva York es el primero en la historia de carácter penal abierto contra un expresidente de Estados Unidos y comenzaría el 15 de abril con la selección del jurado.