La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, durante su intervención en una jornada en el Centro Nacional de Energías Renovables. EFE/Villar López

La ministra Diana Morant ve clave que la ciencia guie a la política en la lucha contra el cambio climático

Sarriguren (Navarra) (EFE).- La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, ha defendido este jueves en el Centro Nacional de Energías Renovables ubicado en Sariguren (Navarra) que la lucha contra el cambio climático dependerá de la “voluntad política” de hacer caso a la ciencia.

La ministra ha hecho estas consideraciones durante su intervención en la clausura de la jornada de presentación de un informe de tendencias en energías renovables elaborado por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) en la que ha participado junto a la presidenta de Navarra, María Chivite.

Morant, que ha puesto en valor que “Navarra ha hecho de las energías renovables una señal de identidad”, ha señalado que la ciencia “es la que nos va a decir cómo salir de este reto” y ha advertido que esta es tan importante “como la voluntad política de hacerle caso y dejarse guiar”.

“El mejor legado que nuestra generación ha de dejar es un planeta habitable que vendrá de la mano de un nuevo modelo de energía”, ha proclamado subrayando que corresponde a las generaciones presentes constituir “esa alternativa energética verde, sostenible, segura y asequible”.

Cifras récord en producción de energía solar

España, ha destacado, es el primer país del mundo en porcentaje de energía solar en el suministro eléctrico y tiene cifras récord en producción de energía que se ha traducido en una reducción de la factura de la luz. Además, ha indicado, es el quinto país del mundo y el segundo de Europa con mayor potencia eólica instalada y desarrolla 1/5 de los proyectos de energía verde.

Ha criticado a quienes niegan que existe el cambio climático o consideran que no puede hacerse nada para solucionarlo, esto segundo a su juicio más peligroso ya que implica “saber que algo está ocurriendo y no hacer nada por evitarlo o pensar que son otros los que lo tienen que hacer”.

Navarra, referente en energías renovables

Por su parte, María Chivite ha destacado que Navarra es “referente en España en el desarrollo de las energías renovables” generándose un sector económico “muy potente” que genera empleo en miles de personas y contribuye a generar “progreso, desarrollo y talento”.

Además, ha puesto en valor, la ciudadanía “ha integrado con naturalidad la necesidad de ser autosuficientes energéticamente” gozando las renovables de “enorme aceptación social” y siendo consciente de que “detrás está el factor humano” y “es necesario actuar urgentemente para reducir emisiones”.

Muestra de ello, ha señalado, es que “en la primera mitad de esta década vamos a avanzar más que en los últimos 30 años”.
El consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Mikel Irujo, ha recordado que la Comunidad Foral dio hace dos semanas autorización administrativa previa a 34 parques de energías renovables “prácticamente duplicando la potencia” actual.

A pesar de esto ha advertido que si se duplica la potencia instalada “va a haber que tomar medidas para poder usar bien esa energía” apoyando a la industria en la transición energética.

Navarra, ha referido, ha incrementado un 300 % su autoconsumo desde el 2020 y las renovables suponen el 23 % del consumo de energía total de la Comunidad Foral, una cifra aún lejos de los compromisos que marca Europa en el futuro pero que va “por el buen camino”.

Nuevos desafíos

Durante la presentación del estudio la politóloga Cristina Monge ha advertido que la apuesta por las energías renovables “genera otro tipo de desafíos” sociales, económicos o tecnológicos”, por lo que “lejos de buscar una única solución” lo necesario es ir resolviendo también estos problemas que genera la apuesta por las renovables.

Además, ha aclarado, “no todo el mundo va a salir beneficiado por esta transición” ya que todas las transiciones tienen víctimas y “hacen falta unas políticas pública que pongan el foco en quienes pueden salir peor parados”.

Según ha informado la directora de Estudios de indicadores de FECYT, Victoria Millor, el estudio presentado muestra que las principales preocupaciones de la población son la subida del precio de la energía, la escasez de la energía y evitar el cambio climático y la contaminación.

En esta materia, ha indicado, las principales contradicciones referidas por parte de expertos en sociología ambiental son que la concienciación ecológica extendida entre la población no se refleja en sus acciones así como la confianza de la población en que las energías renovables son la solución a la crisis climática y solo con implantarlas bastará para un escenario de cero emisiones.

Luchar contra el cambio climático, una prioridad

Por su parte el director de RRII de Solaria, David Redoli, ha referido que la prioridad actual es investigar cómo luchar contra el cambio climático, cómo abaratar los precios de la energía y cómo alcanzar la soberanía energética, cuestión que se traduce en “seguridad nacional” al no depender de terceros.

El retardismo, ha señalado, es “ el principal enemigo de la transición ecológica” ya que esta se puede conseguir pero “tenemos que hacerla en menos de una década y eso implicará ganadores y perdedores” con afecciones negativas que hay que enfrentar ya que las otras alternativas son centrales energías o combustibles fósiles. EFE