Pamplona (EFE).- El mundo rural español ve el futuro con optimismo y, de hecho, se empiezan a ver “brotes verdes”, ya que es un ámbito que vuelve a ser atractivo para los jóvenes, según se ha puesto de relieve en la VII Feria Nacional para la Repoblación de la España Rural “Presura 2023” que se celebra en Pamplona.
En la apertura de la feria, que tendrá lugar del 20 al 22 de octubre, el secretario general para el Reto Demográfico, Francisco Boya, ha destacado el “hambre de futuro que tienen nuestros pueblos” y ha asegurado que desde el Gobierno “miramos el futuro con optimismo”.
No obstante, ha matizado que no se debe “confundir el optimismo con la ingenuidad”, ya que la despoblación en España “es un reto muy difícil, pero en ello nos estamos dejando la piel”.
La despoblación es “un desafío territorial enorme” que “lo tiene España, lo tiene Europa, lo tienen otros continentes”, ha señalado Boya, quien ha considerado que es “imprescindible” trabajar de forma colaborativa, con enfoques innovadores y, sobre todo, “poner en el centro a las personas, que queremos que sigan habitando esos lugares”.
Reinventar la ruralidad
Tras mostrar el compromiso del Gobierno de España con el medio rural, Boya ha incidido en que las ciudades, “si quieren ser sostenibles”, necesitan a los pueblos.
España es “uno de los países mejor conectados de Europa” y eso “nos da un enorme catálogo de oportunidades para hacer cosas” en los pueblos, pero al mismo tiempo “hay que reinventar la ruralidad, porque nadie quiere volver a la ruralidad de hace 50 años”, ha resaltado.
En este sentido, ha declarado que, para invitar a los jóvenes a ir a los pueblos, hay que crear en los mismos “pistas de aterrizaje” para que estas personas puedan desarrollar su proyecto vital en el medio rural.
“No queremos tener lugares olvidados ni lugares que no importan”, ya que “todos los pueblos son tan importantes como la capital del país”, ha indicado Boya, quien ha apostado por “una España de pueblos vivos, de gente con esperanza”.
Un reto “descomunal”
Ha intervenido asimismo en la apertura el director de la feria, Joaquín Alcalde, quien ha explicado que la misma comenzó a celebrarse hace siete años en Soria, donde “tristemente, sabemos bastante de este problema”. De hecho, ha apuntado, “venimos del futuro a contaros lo que puede pasar”.
El reto de la despoblación “es descomunal, es un problema complejísimo”, pero en los últimos ocho o nueve años “hemos avanzado mucho” y al menos se ha conseguido que este problema se reconozca, aunque “las políticas aún son un poco descoordinadas en este tema”, ha lamentado. Al respecto, ha sostenido que, “mientras nuestros políticos no sean capaces de ponerse de acuerdo y atacar el problema de forma coordinada, no vamos a conseguir nada”.
Alcalde ha considerado que en los pueblos españoles “empieza a haber brotes verdes”, ya que se observa “una tendencia clarísima de vuelta a lo rural” de los jóvenes. La conexión a internet es un tema “resuelto”, ha dicho, y el principal problema ahora mismo es la falta de vivienda y la movilidad.
Entre 4.000 y 5.000 visitantes
La apertura de la feria ha contado con la asistencia, entre otros, de la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, el presidente del Parlamento foral, Unai Hualde, y la alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola, así como parlamentarios y otros representantes institucionales.
Este fin de semana se espera que visiten la feria entre 4.000 y 5.000 personas, que podrán asistir a 11 mesas redondas con 80 ponentes sobre temas como la cultura, los nómadas, la tecnología o el cine.
En la feria, en la que hay 80 expositores, se entregarán asimismo los premios del concurso de emprendedores rurales.
