Bilbao (EFE).- La escritora Dolores Redondo ha confesado que con su nueva novela, “Esperando al Diluvio” (Destino) salda una “deuda personal” con Bilbao.
Redondo ha explicado en la presentación de la novela que adquirió libremente esta “deuda” hace 9 años cuando el gremio de libreros bilbaínos le concedió su premio, la Pluma de Plata.
Dolores Redondo (San Sebastián, 1969), autora de la exitosa trilogía del Baztan ha señalado que cuando le concedieron el premio prometió “una novela situada en Bilbao, y aquí esta”.
“La elección del Bilbao de 1983 y no de otra ciudad industrial que podía haber sido Sestao, Vigo o Pasajes, como escenario donde se desarrolla el desenlace de la trama de la novela, viene motivada por una cuestión de puro cariño hacia esta ciudad”, ha destacado.
La trama narra la persecución hasta Bilbao de un asesino en serie de mujeres escoces, bautizado por los medios como John Biblia, en el Glasgow de finales de los 60 por un policía apartado del caso por sus graves problemas de salud.
“Desde mis primeros pasos en la novela, desde ‘El guardián invisible’, que pronto cumplirá 10 años, el cariño, el afecto y el reconocimiento que he recibido en Bilbao sólo tiene parangón con el que he recibido en Barcelona y me han hecho llegar ese cariño a lo grande, como se hacen todas las cosas en Bilbao”, ha apuntado.
Bilbao, agosto de 1983
El situar la acción en el Bilbao de agosto de 1983, en los días previos a las lluvias torrenciales que provocaron las devastadoras inundaciones que sufrió la capital vizcaína cuando celebraba sus fiestas patronales, la ha obligado a realizar una exhaustiva investigación histórica sobre el convulso clima político y social en el que se produjo aquella catástrofe: la presencia de la heroína en las calles, el terrorismo de ETA, el comienzo del despliegue de la Ertzaintza, etc.
Ha explicado que le atrajo el caso del asesino en serie de mujeres de Glasgow John Biblia porque quedó sin resolver y el asesino sin detener, lo que le ha dado la posibilidad de ficcionar aquellos hechos.

La autora ha considerado que la posibilidad de que acabase en Bilbao no es del todo descabellada por la relación que siempre ha existido entre la capital vizcaína y el Reino Unido y la existencia de una línea marítima que les unía hace 40 años y que sigue existiendo a día de hoy.
Este caso sin resolver también le ha dado la posibilidad de explorar el mal que anida en el ser humano, personificado en la figura de dicho asesino, al que la hermana de su última víctima conoció y al que describió como “muy joven, muy pulcro y educado, que recitaba versículos de la Biblia”.
Amor y miedo, presentes en la novela
Redondo ha admitido que en su nueva novela, que ha deseado que le guste al público y de la que se hará una tirada de 330.000 ejemplares, según ha informado la Editorial Destino, también están “muy presentes”, al igual que en sus obras precedentes como la trilogía del Baztan, “el amor y el miedo”.
“El amor y el miedo -ha argumentado-, son dos lecciones que recibimos todos los seres humanos en nuestra propia casa, aprendemos cómo se ama, cómo es el amor y a tener miedo y a qué tener miedo, también”.
“Podemos tener miedo a los perros -ha dicho-, porque lo tiene nuestra madre o podemos tener miedo a nuestra madre, que es lo peor de todo porque, cuando el horror se fragua dentro del lugar donde todos deberíamos sentirnos a salvo, que es en nuestro hogar, pues no tienes a donde ir”.
“Y cuando la injusticia se comete sobre alguien indefenso, como puede ser un niño o un anciano -ha agregado-, que para mí son los dos tipos de víctimas más sangrantes porque no pueden defenderse, me parece lo más bestial, y seguiré escribiendo sobre esto y sobre ese tipo de mal que crece como una flor negra donde deberíamos sentirnos seguros”, ha añadido.
Redondo ha considerado por último que la novela negra no tiene porqué ser una crítica social: “no me apetece escribir sobre corrupción política en mis obras porque los políticos no me interesan, pero sí me apetece hablar de lo que me conmueve, de lo que me produce rabia y lo que me conmueve son las injusticias contra los niños, los ancianos, los pobres, los indefensos, los que no tienen voz”.
La escritora donostiarra ha informado también de que la presentación de “Esperando al diluvio” al público también tendrá lugar en Bilbao, en el Teatro Arriaga (uno de los escenarios fundamentales de su novela), el próximo 28 de noviembre. EFE