Bilbao, (EFE).- El presidente del BBVA, Carlos Torres, considera que “en momentos como el actual” es cuando más se pone en valor la solidez y fortaleza de bancos como el BBVA y ha asegurado que, a pesar de las incertidumbres y de la volatilidad, el grupo encara 2023 con confianza.
Antes de dar comienzo a la junta de la entidad celebrada en el Palacio Euskalduna, el presidente del BBVA se ha mostrado optimista con la evolución del banco en 2023.
A pesar de las incertidumbres y de la volatilidad en los mercados -tras la caída del Silicon Valley Bank en Estados Unidos y el rescate de Credit Suisse-, Torres ha insistido en las perspectivas de crecimiento “rentable” del BBVA en sus mercados principales.
Además de en España, el BBVA está presente en buena parte de Latinoamérica -es el primer banco de México- y también en Turquía.
La alta inflación, un reto
No obstante, el banquero ha reconocido durante su intervención ante los accionistas que la alta inflación está suponiendo “un enorme reto para las familias, reduciendo su poder adquisitivo, especialmente el de aquellas más vulnerables”.
Para hacer frente al encarecimiento de los precios, los bancos centrales han subido los tipos “con una rapidez desconocida hasta ahora”, lo que supone una carga adicional para la economía familiar. En el BBVA, “somos conscientes de ello y buscamos soluciones”, como alternativas para facilitar el pago de hipotecas, ha añadido.
Asimismo, ha explicado que la subida de tipos está teniendo impacto en los mercados financieros, “provocando episodios de volatilidad e incertidumbre” como los de esta semana, en alusión al rescate de Credit Suisse y el temor a una nueva crisis financiera.
Sin embargo, Torres ha destacado la mejora de las perspectivas económicas para 2023 en prácticamente todos los países en los que está presente el BBVA, que espera que la economía española crezca un 1,6 % en 2023.

Durante su discurso, el presidente del grupo también hizo mención a los terremotos en Turquía y Siria, antes de recordar los logros del banco en 2022, entre ellos la incorporación de más de 11 millones de clientes para llegar a casi 70 millones en todo el mundo.
Más de 3.000 millones en dividendo
La junta ha servido para aprobar la distribución de 3.015 millones de euros mediante el pago de un dividendo en efectivo de 43 céntimos de euros por acción -casi un 40 % más que en 2021-, de los que 12 céntimos ya fueron abonados en octubre, y un nuevo programa de recompra de acciones de 422 millones de euros.
Por su parte, el consejero delegado de BBVA, Onur Genç, hizo hincapié en el resultado atribuido récord de 6.621 millones de euros, el mejor de la historia del banco, y “la tendencia creciente en beneficios de los diez últimos años”, exceptuando el año del estallido de la pandemia.
Mujeres en el Consejo de Administración
La reunión ha servido también para dar el visto bueno al nombramiento de la mexicana Sonia Dulá como nueva consejera de la entidad, lo que amplía el perfil internacional del máximo órgano de gestión y mantiene en el 40 % la representación femenina.
Además del nombramiento de Dulá, que ocupa la vacante en el consejo que dejó Susana Rodríguez, los accionistas también han dado su apoyo a la reelección de los consejeros Raúl Galamba, Lourdes Máiz, Ana Revenga y Carlos Salazar.
De esta forma, el máximo órgano de gestión del BBVA amplía el número de miembros con la condición de independientes hasta un 73 % (11 de 15) e incrementa el perfil internacional del consejo. La representación de mujeres continúa en el 40 %, con seis consejeras.
Durante el turno de intervenciones de los accionistas en la junta, el expresidente de Sacyr Luis del Rivero, personado en el caso Cenyt que investiga la relación del banco con empresas del excomisario José Villarejo, demandó una renovación del consejo para que no haya ningún miembro de los que estaba en 2018.
También pidió, un año más, mayor colaboración del BBVA con la justicia.
Ante estas dos demandas, el presidente del BBVA explicó que la renovación de los consejeros se hace siguiendo las mejores prácticas de gobierno corporativo y añadió que en los últimos tres años se han incorporado cinco nuevos consejeros. El secretario de la entidad, por su parte, aseguró la plena colaboración del banco con la justicia.
Quejas de los sindicatos
Entre el resto de accionistas que tomaron la palabra destacó la intervención de varios representantes de los sindicatos que se quejaban de la “precariedad” de los empleados del banco, su pérdida de poder adquisitivo y unas condiciones laborales en las que “muchos” sufrirían estrés y ansiedad.
A todos ellos, de manera conjunta, el presidente del BBVA les trasladó la idea de que los empleados son el mejor activo de la entidad, al tiempo que recordó algunas decisiones del banco para mejorar las condiciones laborales, como el impulso de un modelo híbrido de teletrabajo o incrementos salariales en España.
Y frente al escenario de trabajo descrito por los sindicatos, ha citado una encuesta de satisfacción en la que participó más del 94 % de la plantilla para poner una nota de 4,39 sobre 5, cada año mejor.
En el turno de respuestas, Torres también recordó el compromiso del banco con la atención de los mayores y a la pregunta del presidente de Adicae, Manuel Pardos, de por qué no suben la remuneración de los depósitos, el banquero respondió que la liquidez del sector sigue siendo muy elevada y hay una amplia gama de productos alternativos para quienes busquen más rentabilidad. EFE