Desarticulada una banda que estafó a más de 3.000 personas con supuests criptomonedas.EPA/Alex Hofford

Desarticulada una banda que estafó a más de 3.000 personas en todo el mundo con criptomonedas

La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal internacional acusada de estafar más de cien millones de euros a más de tres mil personas en todo el mundo con criptomonedas inexistentes, en una operación en la que ha sido detenida una persona en Palma de Mallorca.

La operación “Mandoa” ha sido llevada a cabo por especialistas en ciberdelincuencia de la Guardia Civil del País Vasco, de Baleares y de la Unidad Técnica de Policía Judicial en Madrid y dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Vitoria.

La investigación se inició tras la denuncia de una persona en Álava que fue víctima de una estafa al invertir en criptomonedas. La Guardia Civil siguió el rastro de las transferencias de dinero que tenían como destinataria a una empresa ubicada en Palma de Mallorca.

Esta empresa posteriormente realizaba nuevas transferencias a países de fuera de la Unión Europea, que era el destino final del dinero. Además del empresario balear detenido hay varios imputados en Azerbayán, Georgia, Ucrania, Rusia e Israel.

Una imagen de archivo de criptomonedas.
Una imagen de archivo de criptomonedas. EFE

En las investigaciones se pudo constatar que los miembros de la organización captaban clientes mediante estrategias comerciales agresivas a través de internet, con llamadas telefónicas, anuncios publicitarios en periódicos, mensajes a los móviles y otros medios en los que prometían altos rendimientos sin riesgo.

Una vez que la organización formalizaba el contrato con sus víctimas para realizar las inversiones en criptomonedas inexistentes, que normalmente oscilaban entre los 250 y 1.000 euros, la organización les facilitaba un acceso a una página web donde se podían consultar los beneficios de su inversión con falsos gráficos creados al efecto.

Los inversores recibían constantes llamadas telefónicas en las que los falsos brokers les informaban de los “enormes beneficios” obtenidos y les animan a continuar con las inversiones inexistentes. Algunos de ellos llegaron a invertir todos sus ahorros.

Cuando la víctima pretendía recuperar lo invertido o los supuestos beneficios obtenidos, los falsos brokers le pedían más dinero para poder retirar los fondos empleando para ello diferentes excusas, como el pago de impuestos o el cierre de balances anuales, con lo que se producía un segundo engaño.

Desconfiar de promesas

La Guardia Civil ha recordado que se debe desconfiar de las promesas de obtener un gran beneficio o un rendimiento garantizado sin ningún tipo de riesgo y de las ofertas de inversiones que se reciban por internet o por teléfono sin haberlas solicitado.

También aconseja investigar antes de invertir, buscar opiniones y reputación de las webs antes de realizar inversiones, desconfiar de páginas de reciente creación, revisar la dirección ya que a menudo contiene errores ortográficos y no hacer aportaciones en plataformas que tengan la sede social en paraísos fiscales.

Si a pesar de estos riesgos, se desea realizar este tipo de inversión, se recomienda a los ciudadanos que consulten con los organismos oficiales que publican periódicamente las webs que operan con irregularidades.